oñati - El león cavernario de Arrikrutz volverá a su cueva gracias a una reproducción exacta. Fuentes de la Agencia de Turismo y Desarrollo de Oñati confirmaron a este periódico que la réplica partirá de un modelado en tres dimensiones del cráneo realizado por la Diputación Foral de Gipuzkoa y en la que ha colaborado la Sociedad de Ciencias Aranzadi.

El Ayuntamiento de Oñati ha aprobado recientemente que, a partir de esta simulación, sea Alfa Arte -empresa eibartarra encargada de la ejecución de obras monumentales de escultores- la responsable de llevar a cabo el trabajo, presupuestado en 2.510 euros. Si bien este aún no ha comenzado, las fuentes consultadas estimaron que el nuevo cráneo estará listo en un plazo aproximado de mes y medio.

Desde la agencia recordaron que tanto el cráneo del animal como los restos hallados en la cueva hace más de medio siglo “son un auténtico tesoro”. Es por ello que, aunque ya contaban con otro tipo de reproducciones, deseaban que una exacta fuese parte de las cuevas, situadas bajo el macizo de Aizkorri. La réplica permitirá al personal encargado de enseñar las grutas contar con una réplica ósea que hará que los visitantes, tanto adultos como niños, tengan una visión fiel y entiendan la dimensión de lo que fueron los leones cavernarios.

Actualmente, tanto el cráneo como el resto de huesos del animal de Arrikrutz se encuentran expuestos en el Museo San Telmo, en una muestra que toma como punto de partida el descubrimiento del león para introducir al visitante en la fauna depredadora de antaño.

De forma previa, los restos del animal habían sido exhibidos en el Museo de la Evolución de Burgos, donde se preparó la instalación que permite al visitante hacerse una idea de cómo lucía el animal cuando caminaba.

El león de Arrikrutz cerrará sus puertas en San Telmo el próximo 10 de febrero y los vestigios del felino volverán a ser parte del inventario del Centro de Colecciones Patrimoniales de la Diputación de Gipuzkoa (Gordailua), por lo que quienes no hayan podido visitar la exposición, tendrán todavía la opción de ver en las cuevas de Oñati la réplica más fiel posible.

hallazgo Los restos del animal fueron encontrados en el año 1966 por Iñaki Zubeldia -se produjo cuando este se introdujo en las cuevas y se perdió a la hora de salir-. Considerado uno de los esqueletos más completos de la península ibérica, se trata de los huesos de un león adulto que falleció en una de las galerías, que en vida tenía una altura hasta el hombro de 1,2 metros, una longitud de 2,2 metros y un peso aproximado de 250 kilos. Las señales que se aprecian en los restos, como la fractura de varias costillas, llevan a los investigadores a pensar que fueron causadas por otro animal y que se encontraban en proceso de curación cuando el león murió.

Si bien los citados vestigios son los más conocidos, no son los únicos que se encontraron en Arrikrutz. En otra de las galerías, en la denominada Larrayoz, se descubrió un fémur de otro ejemplar que por su tamaño se estima que llegó a pesar hasta 330 kilogramos -los investigadores piensan que por las dimensiones era un macho-.

Si bien a estos felinos se les conoce como leones cavernarios, esta nomenclatura puede llevar a equívoco. No en vano, se les llamó así porque los restos del primer espécimen de este tipo se encontraron dentro de una cueva a principios del siglo XIX, pero investigaciones posteriores demostraron que esto no era así.

En este sentido, este tipo de animal, que llegó a Eurasia hace 600.000 años y se extinguió hace 14.500, podría haberse introducido bajo tierra por varios motivos: atraído por el olor de alguna presa -y sin encontrar después la salida- o arrastrado por algún carroñero que lo hubiese herido.

1966

El hallazgo de los vestigios del león de las cuevas de Arrikrutz se produjo en 1966. Fueron descubiertas por Iñaki Zubeldia mientras exploraba las galerías. Zubeldia se perdió dentro de la gruta.Fama. En el año 1981, Jesús Altuna publicó un artículo científico sobre su investigación en la revista alemana Bonner zoologische Beiträge, que dio repercusión mundial al descubrimiento.

Leones. Además de gran parte de un esqueleto de un sujeto, posteriormente se encontro un fémur de otro león de las cavernas en la galería Larrayoz. El de Arrikrutz tuvo una altura hasta el hombro de 1,2 metros, una longitud de 2,2 metros y un peso aproximado de 250 kilos, mientras que el de Larrayoz, basándose en el tamaño del hueso, tuvo un peso aproximado de 350 kilográmos. Este dato, además, podría indicar que se trataba de un macho.

Otra fauna. Además de los felinos, se han encontrado en estas cuevas restos de osos de las cavernas, de cabras montesas y de un rinoceronte lanudo.