Los nombres de Neil Armstrong, John Glenn, Yuri Gagarin y otros grandes astronautas masculinos se enseñan en los colegios como héroes que hicieron posible la carrera espacial. Sin embargo, casi nadie conoce a Katherine G. Johnson, Dorothy Vaughan y Mary Jackson, unas brillantes afroamericanas empleadas de la NASA que hicieron posible una de los grandes avances de la historia espacial: la puesta en órbita del astronauta John Glenn en 1962.
Basándose en el libro de Margot Lee Shetterly, Figuras ocultas recupera a estas heroínas olvidadas que, además de realizar una importante contribución a la carrera espacial, hicieron frente a las dificultades derivadas de su condición de mujeres y afroamericanas en la América de los años 50 y 60. La película, dirigida por Theodore Melfi, nos sitúa en un momento decisivo y de grandes desafíos para la historia de Estados Unidos: la lucha por los derechos civiles, la batalla por ganar la Guerra Fría y la carrera por convertirse en la primera potencia espacial.
Tras el lanzamiento del satélite Sputnik por parte de la Unión Soviética en 1958, la carrera espacial se convirtió en una prioridad para EEUU, que quería demostrar su potencial tecnológico. Debido a la escasez de científicos y matemáticos hombres y a las nuevas leyes contra la discriminación racial, los contratistas de defensa y las agencias federales empezaron a buscar mujeres y afroamericanos con las competencias necesarias.
Así llegó la oportunidad para Katherine, Dorothy y Mary, tres mentes brillantes que trabajaron en el Centro de Investigación Langley en Hampton (Virginia) para la NACA (precursora de la NASA). A falta de los ordenadores digitales actuales, su misión era convertirse en “ordenadores humanos” que pudieran realizar rápidas y avanzadas operaciones en su cabeza para calcular de manera precisa las trayectorias de vuelta de un cohete.
Cuando la NACA se convirtió en la NASA, Katherine, Dorothy, Mary pasaron a formar parte del programa espacial de alta velocidad. En una sociedad que las trataba como ciudadanas de segunda, las tres mujeres hicieron una importante contribución al programa y lograron ganarse el respeto de sus superiores gracias a su gran capacidad intelectual, su actitud positiva y optimista y su apoyo mutuo.
En inglés, la película lleva por título Hidden figures (Figuras escondidas o cifras escondidas ) que hace referencia tanto a las protagonistas como a las matemáticas. Para adaptar la novela, la productora contó con Allison Scroeder, una escritora y matemática nieta de una programadora de la NASA. En el papel de las tres protagonistas encontramos a Taraji P. Henson (Katherine), Octavia Spencer (Dorothy) y Janelle Monáe (Mary), a las que acompañan Kevin Costner como Harrison (un personaje ficticio basado en una mezcla de líderes reales de la NASA), y Jim Parsons, conocido por su papel de Sheldon en la serie Big Bang Theory.