donostia - El consejo de administración de Tabakalera aceptó ayer la dimisión del director-gerente, Haritz Azkarraga, que deja el cargo después de cuatro años de trabajo. La “pérdida de confianza” de las instituciones en la labor de Azkarraga se encuentra detrás de la decisión.

El director-gerente y los tres miembros del consejo (Diputación de Gipuzkoa, Ayuntamiento de Donostia y Gobierno Vasco) mantenían desde hace tiempo discrepancias sobre la gestión del Centro Internacional de Cultura Contemporánea. Según ha podido saber este diario, las instituciones achacan al ya exdirector-gerente la falta de un plan operativo para el centro, entre otras tareas. A ello se suman los variados problemas que ha sufrido Tabakalera desde su gestación y que actualmente arrastra. De hecho, un año después de inaugurarse la infraestructura -el 11 de septiembre de 2015- no se han iniciado las obras del hotel previsto y tampoco ha visto la luz el restaurante que se ha creado en el prisma que corona el edificio del barrio de Egia.

El propio consejo de administración reconoció en el comunicado que hizo público ayer las “discrepancias y disparidad de criterios” que han existido entre ambas partes durante estos cuatro últimos años, por lo que “lo mejor para Tabakalera es concluir la relación laboral”. En la misma nota de prensa, el consejo de administración, presidido por la consejera de Educación y Cultura, Cristina Uriarte, anunció que convocará un proceso de selección para cubrir la vacante de director-gerente que deja Azkarraga.

No será probablemente el único proceso de selección que Tabakalera llevará a cabo, ya que los responsables institucionales han encargado a la directora cultural, Ane Rodríguez que prepare una nueva propuesta de organigrama del centro.

director general La Diputación, el Ayuntamiento y el Gobierno Vasco quieren incorporar al esquema de Tabakalera la figura de un director general que “lidere el proceso de maduración del proyecto”, según señalaron a este diario fuentes del consejo de administración. Esta nueva dirección general daría apoyo a la dirección cultural para disponer de una “visión del conjunto del proyecto”.

Por otra parte, el consejo de administración celebrado ayer por la tarde también abordó el balance final de las obras, si bien su aprobación se postergó a una próxima reunión, una vez analizada la documentación.

Las instituciones no trataron el retraso en la apertura del restaurante y el proyecto de hotel, que fue adjudicado a Nuevos Espacios Habitables en mayo de 2015, pero cuyas obras aún no se han iniciado. La empresa madrileña se comprometió a abrir el establecimiento en febrero de este año, pero las obras ni siquiera han comenzado. Ante semejante retraso, el consejo de administración ha impuesto a Nuevos Espacios habitables una multa de 560.000 euros. - N.G.