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“Tengo un extenso fondo de armario y juego con la ropa”

Maite Eskarmendi presentará en breve el programa ‘Itxuroso’, dedicado a cambiar el ‘look’ de aquellas personas que por cualquier motivo deseen dar un toque distinto a su imagen

“Tengo un extenso fondo de armario y juego con la ropa”deia

donostia - Maite Eskarmendi y Unai Goikolea serán los encargados de presentar un programa de cambio de imagen en ETB-1. Peluquería y vestuario serán los aspectos que se aborden en Itxuroso. Maite ha comentado para este periódico cómo ve el programa que va a presentar y cómo vive ella el mundo de la moda, las tendencias y cómo se viste y se peina. Es periodista y también ha sido personal shopper. Le encantan los trapos y crear estilo. Dice que ha mamado este mundo desde pequeña viendo coser a su padre que era sastre y a su madre ayudándole. Es una mujer dinámica y muy divertida.

¿Cómo va a ser su nuevo programa?

-Nos vamos a centrar en cambiar la imagen en peluquería y vestuario. En cada programa se lo haremos a cuatro personas. Cada una de ellas llega a nosotros por un motivo diferente.

¿Qué motivos presentan?

-Quieren un cambio especial porque tienen un evento, están cansados de su imagen, otros han sido animados por la familia y les han apuntado en el programa?

¿Un cambio radical?

-No, adecuándolo a la persona. Tenemos una visagista que se encargará de estudiar cuál es el corte de pelo que mejor le puede ir a nuestra invitada o invitado por su morfología facial. Una vez realizado el estudio se ofrecerán diferentes opciones.

¿De qué se encargan Unai Goikolea y usted?

-Ofreceremos diferentes propuestas de vestuario teniendo también en cuenta la morfología del cuerpo de las personas que se pongan en nuestras manos, teniendo en cuenta sus gustos y siguiendo las indicaciones que nos den para el cambio: puede ser para una entrevista de trabajo, un evento o, simplemente, un cambio de imagen. Damos, igual que con el pelo, diferentes opciones, explicando por qué las hemos elegido. El resultado no se ve hasta el final, a la persona se le tapan los ojos y se le quita la venda delante de un espejo para que compruebe el cambio.

¿Le gusta el mundo de la moda?

-Mucho. Lo he mamado desde cría, mi padre era sastre y tenía el taller en la habitación que compartíamos mi hermano y yo. Toda la vida he visto a mis padres cosiendo. Él hacía trajes y mi madre le ayudaba. He visto a mi aita cortando patrones, cosiendo? Cuando era pequeña me tocaba vestirme con la ropa que me hacía mi padre.

Lo más habitual ha sido siempre que las madres cosieran las ropas de sus hijos.

-En mi casa era al revés, mi madre también cosía, pero el que confeccionaba era mi padre. Por eso quizá el mundo de los trapos siempre me ha gustado mucho. Me gusta vestir diferente, lo utilizo como una forma de expresión. No pinto, no hago escultura, el vestirse dice mucho de una persona. Transmito cuando me visto lo que otra gente hace con otras disciplinas.

¿Cuál es su estilo?

-No creo que sea muy definido, no sigo las tendencias a rajatabla?

Pero, ¿está al tanto de ellas?

-Sí, me gusta saber lo que se lleva. Lo que veo que puede quedarme bien o me gusta lo cojo, siempre me apetece darle a mi estilo un toque muy personal. Los desfiles, las tendencias y la moda están muy bien, pero hay que ser prácticos también.

Así que la moda no le obsesiona.

-No. Además, no me voy a obsesionar con algo que ha sacado Prada cuando no tengo acceso a ello. Me fijo mucho en los detalles, tengo un fondo de armario muy extenso. Juego con la ropa.

¿Cómo se juega con la ropa?

-Según el día que tenga elijo los colores o lo que me voy a poner. Lo mismo puedo ir un día de traje, que puedo ir un día más hippie. Voy según mi estado de ánimo y lo que me apetezca. No intento ir como un clown, pero tampoco soy una persona que se vuelva loca por seguir las tendencias de moda que salen constantemente.

¿Cree que es malo seguir las tendencias?

-Hay gente que se dedica a seguirlas le queden mal o no. Pero esa es una opción de cada cual, ni mala ni buena. Lo que hago yo es fijarme en la calle e intentar crear cosas que nadie lleve, un estilo diferente, que sea más personal. Vestirnos es algo que tenemos que hacer todos los días, afortunadamente para unos y desgraciadamente para otros. Hay gente a la que le da mucha pereza.

A usted no le da ninguna pereza, ¿no?

-Yo disfruto como si estuviera jugando. Durante la noche empiezo a pensar qué me voy a poner al día siguiente. Lo hago para relajarme.

¿Es colorista o sobria?

-Algo intermedio, en cuanto a colores no soy llamativa. Me gustan mucho los tonos pasteles, el negro, el blanco, el marino me gusta mucho? Soy una loca del estilo marino, del navy. Pero cambio bastante, no llevo un estilo fijo, me gusta divertirme e intento jugar. Me encantan las superposiciones, meter una puntillita por aquí y por allá, me divierto con las larguras de las prendas.

También arriesga en pelo, ¿no?

-Soy bastante conocida por mi pelo. Lo llevo rizado, no es un afro. Voy con bastante volumen en la cabeza y llama mucho la atención. Lo que busco siempre es la comodidad. Nunca iré con algo que pueda hacer sentirme incómoda. Salgo a la mañana de casa y lo que quiero es no preocuparme en todo el día de lo que llevo encima. Este pelo me resulta muy cómodo porque no me tengo que peinar, me levanto, me lo sacudo y listo. No soy una persona que invierte mucho tiempo preparándose, más bien lo contrario.

¿Se presentaría a un programa para hacerse un cambio de imagen?

-Es una buena pregunta. Ahora mismo no sé si me haría un cambio porque me siento muy cómoda con la imagen que tengo. Siempre he sido de arriesgar, al tener el pelo rizado tienes que buscar tu estilo, el pelo muy corto, muy largo... He hecho pruebas hasta que encontré este peinado.

¿Lleva mucho tiempo con el peinado actual?

-Estuve presentando para La Sexta hace unos años un programa que se llamaba Sabor de hogar y había una sección que se llamaba Sácate partido. En esa época, tenía el pelo largo y como iba a presentar esa sección de moda me dije que iba a dar ejemplo haciéndome un cambio de look. Fue entonces cuando me corté el pelo y ya no he vuelto a cambiar, aunque antes estaba morena de pelo y ahora lo llevo rubio.