Nude y pedrería

Bilbao

como todos los años, los Premios Goya se convirtieron en un escaparate en el que las actrices lucieron sus los mejores vestidos y peinados por la alfombra roja, un color que contrastó con los colores claros por los que apostaron las actrices.

Este año fue una espectacular Belén Rueda la encargada de inaugurar el desfile para llegar al Palacio Municipal de Congresos de Madrid. Lo hizo vestida de rojo por Pedro del Hierro luciendo escote y, según declaró antes de comenzar la ceremonia, dispuesta a "pasarlo muy bien". En esta ocasión dejó de lado a su inseparable Carolina Herrera, la diseñadora por la que había apostado los últimos años. Pero la que sí se decantó por Carolina Herrera para acudir a la XXVI edición de los Premios Goya, fue la actriz Manuela Velasco. Su elección fue un vestido de chiffon de seda color sepia con estampado de lunares en marrón topo y bordados de pedrería en plata y cristal.

Sin duda otra de las que destacó y lució espectacular en la alfombra de los Goya fue la actriz Michelle Jenner, que estaba nominada por No tengas miedo, a mejor actriz revelación. Lo hizo con un impresionante vestido de tul e incrustaciones en el cuerpo palabra de honor, de Zuhair Murrad, y en tono nude. Otra de las destacadas fue Cayetana Guillén Cuervo, que eligió un vestido de Óscar de la Renta.

María León, ganadora del Goya a mejor actriz revelación, acudió vestida de Valentino con un traje negro palabra de honor y un moño informal. Salma Hayek, por su parte, hizo suyo el lema de que menos es más y se decantó por un sobrio vestido en color vino, de Gucci, con plisados, dejando su melena suelta. Y como no podía ser de otra manera, Goya Toledo fue una de las mejor vestidas de esta edición. La actriz, nominada por su papel de reparto en la película Maktub, escogió un vestido de Eliee Saab con un tono champagne con mucha pedrería y un generoso escote. A la pedrería también se apuntó Marta Etrura, vicepresidenta de la Academia. Apostó por un vestido nude con profundo escote, de la marca Gucci. El momento más emotivo fue protagonizado por Silvia Abascal, encargada de entregar uno de los premios junto a Miguel Ángel Silvestre. Para su reaparición, tras sufrir un ictus cerebral, eligió un vestido rosa palo muy favorecedor.

Otra de las estrellas de la noche de los Goya fue Elena Anaya, que apareció con un vestido de Lanvin en color crudo de escote asimétrico con un poderoso collar y un cinturón dorado. Verónica Echegui, nominada por Katmandú, se decantó por un vestido palabra de honor de corte bajo el pecho, de Gucci. En blanco y con cinturón dorado, la actriz, que acudió acompañada de su chico Álex García, fue una de las más espectaculares de la gala. Tampoco pudo faltar Anne Igartiburu a esta noche del cine. Lo hizo vestida de Lorenzo Caprile, mientras que Leticia Dolera apareció con un vestido de Dolores Promesas.

ellos Pero ellos también marcaron estilo la noche de ayer. Pedro Almodóvar apareció en la alfombra roja con sus inseparables gafas de sol y con total look negro, de Gucci. Por su parte, González Macho, presidente de la academia, lo hizo vestido con su esmoquin de Florentino y pajarita negra, mientras que Juan Diego Botto se decantó por Dior y Coronado por un esmoquin de Armand Basi.