El valor de un puente

EL director de cine bosnio Emir Kusturica ha anunciado un polémico proyecto basado en un poblado de piedra en Visegrad, donde se desarrolla la novela El puente sobre el Drina de Ivo Andric, Nobel de Literatura en 1961.

Los alrededores del famoso puente Mehmed Pasa Sokolovic de Visegrad, donde Kusturica quiere rodar la cinta, están protegidos y no se permite ninguna construcción en su terreno, dijo Dubravko Lovrenovic, un miembro de la Comisión bosnia de Conservación de Monumentos Nacionales.

Kusturica planea construir en Visegrad la Ciudad de piedra para rodar allí la película El puente sobre el Drina, una idea que ha estado preparando desde hace 25 años.

Según la legislación vigente, los únicos trabajos permitidos en la zona son de conservación y restauración en una franja cien metros aguas arriba o abajo del puente, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

La colocación de la primera piedra de Kamengrad tuvo lugar el 13 de enero en Banja Luka. El complejo deberá tener unas 50 casas de piedra, repartidas en calles paralelas unidas por plazas, una iglesia y una galería, y la ciudad se situará entre el Puente sobre el Drina y la desembocadura del río Rzav, de realizarse los planes. "Las casas serán construidas en el estilo renacentista y la ciudad se parecerá un poco a Trebinje y Dubrovnik, con elementos orientales", anunció Kusturica.

La construcción debe iniciarse en los próximos meses y si todo transcurre según el plan, Kamengrad será terminado en 2014, cuando debería comenzar el rodaje del filme inspirado en la obra maestra de Andric, por el que Kusturica siente una especial fascinación.

"Queremos revitalizar la vida de esta ciudad, incluida la administración pública, las tiendas, el cine y el teatro", subraya Kusturica. "No hay pueblo más pequeño que tenga a un escritor más grande que Ivo Andric. Es algo en lo que yo creo sinceramente", apuntó el director.

La novela histórica de Andric está enfocada en el puente que une la orilla serbia y la bosnia del río Drina, construido por Mehmed Pasa Sokolovic en el apogeo del Imperio Otomano. "Para ello es necesario mucho dinero, y sobre todo, se necesita un Estado que considere la cultura como una componente imprescindible para su supervivencia", agregó Kusturica.