Donostia. François Truffaut odiaba su primer cortometraje. La Cinemateca Francesa, que lo custodia, nunca lo cede, y lo programa en escasas ocasiones, respetando las instrucciones de su autor. Con la excepción de esta cinta, el ciclo Nosferatu proyectará la filmografía completa del director francés, 21 largometrajes y tres cortos.

La cita con la retrospectiva empieza hoy con Los cuatrocientos golpes y se repetirá todos los miércoles, en el Teatro Principal, a las 20.15 horas, hasta junio. Según José Luis Rebordinos, todavía responsable de la Unidad de Cine de Donostia Kultura, el ciclo es "para todos los públicos". "Son películas llenas de sentimientos, muy hermosas de ver, no es un cine difícil sólo apto para cinéfilos", argumentó Rebordinos sobre un director "a reivindicar", "controvertido", con obras de "géneros muy distintos" y películas "a las que siempre volvemos". Entre ellas, la mencionada Los cuatrocientos golpes, la primera de las cinco protagonizada por Antoine Doinel, alter ego del cineasta, y la célebre Jules et Jim.

Un perfil jugoso para el libro que siempre edita Nosferatu, titulado François Truffaut. El deseo del cine, que parte de una premisa. Según el coordinador del volumen, Carlos Losilla, el director francés "todavía permanece como un gran desconocido, a pesar de la ingente bibliografía que se le ha dedicado tanto a su persona como a su obra". Rebordinos señaló que, precisamente, están "muy orgullosos" del libro por las nuevas miradas que propone sobre su cine.

Con títulos inclasificables, comedias, cine negro y homenajes a Hitchcock, al cine o al amor, Truffaut fue acusado de traicionar el movimiento que él mismo contribuyó a crear, la nouvelle vague. Su trayectoria plantea, según Losilla, una pregunta: "¿Prevaleció, en el cine de Truffaut, el deseo por encima de la coherencia?". Advertencia para los interesados: "Este libro -confiesa el coordinador- no pretende deshacer este entuerto, sino embrollarlo aún más".