Una muestra recrea en Pamplona la tragedia del Titanic con objetos reales
la exposición ha sido confeccionada a partir de las declaraciones de los supervivientes Se exhiben objetos, documentos sonoros y maquetas del transatlántico de lujo, en el que murieron 1.500 personas
Pamplona. Iruña acoge desde hoy hasta el 30 de enero una exposición con objetos y documentos originales que, unidos a la recreación de varias partes del conocido transatlántico Titanic ya desaparecidas y otros documentos sonoros, acercará a los visitantes al barco más grande que se construyó a principios del siglo xx, en cuyo naufragio en 1912 murieron más de 1.500 personas. Se podrá visitar en el Palacio Baluarte, todos los días entre las 11.00 horas y las 20.00 horas.
Se trata de Titanic the exhibition, una exposición organizada por la Fundación Titanic que, tras permanecer en los últimos años en Alemania y Suecia, al finalizar su estancia en Pamplona se instalará en Dinamarca hasta 2012, cuando regresará a Barcelona para conmemorar el centenario del naufragio. En declaraciones a los periodistas, el presidente de la fundación, Jesús Ferreiro, avanzó que la pretensión de este montaje es contar la historia del Titanic, pero "como la contaron los únicos que de verdad podían contarla, que fueron los que estuvieron allí".
Para ello, los organizadores han tenido la "paciencia y la oportunidad de leer todas las declaraciones que hicieron los supervivientes a su llegada a Nueva York ante una Comisión del Congreso de los Estados Unidos" y, si bien hay versiones dispares, se han atenido al nexo común de lo que cuenta la mayoría. Además, Ferreiro señaló que la exposición, arrancó en el año 2000 como una muestra mucho más pequeña pero con los años se han ido incorporando un buen número de piezas que ahora obliga a utilizar doce camiones para su traslado. Se ha hecho "al revés de lo que normalmente se hace, ya que generalmente primero se cogen objetos y después se escribe el guión".
guión de un naufragio "Aquí hemos hecho lo contrario: hemos confeccionado el guión con lo que han dicho los supervivientes y después hemos podido elegir los objetos y documentos para contar la historia, que queda tan impresionante que hay muchos lugares de la exposición donde resulta muy difícil contener las lágrimas".
"Hay mucha emoción, sobre todo cuando estás escuchando por los auriculares las historias y a la vez viendo los objetos, como el anillo de una mujer que falleció cuando la subían a un bote, las botitas de una niña de 7 años, las cartas de amor que se escribieron personas que han muerto", describió.
Son ya 30 millones de personas las que han visto la muestra en todo el mundo y con ello se ha conseguido que el Titanic "no se haya hundido, porque está navegando en millones de corazones de las personas que visitan la exposición".