Estella-Lizarra ha rubricado su pasado carlista con la apertura el pasado martes del Museo del Carlismo habilitado en el antiguo Palacio del Gobernador, en pleno corazón monumental de la Ciudad del Ega, en la calle La Rúa. En estas primeras jornadas de apertura al público, en las que tanto la entrada como las visitas guiadas están siendo gratuitas, unas 500 personas diarias de media han pasado por las nuevas instalaciones. La apertura del museo trece años después de que la idea ha permitido desvelar uno de los secretos mejor guardados, qué fondos mostraría el museo, una colección que supera las 400 piezas, aunque en la muestra permanente se contemplan 80 y en la temporal 120.
Los fondos corresponden por un lado, a la cesión realizada por el Partido Carlista-EKA, con 111 piezas que estarán en el museo en depósito indefinido. El resto, sobre todo en lo que se refiere a armas y al uniforme de requeté, han llegado desde la Fundación Jaureguizar, mientras que otros objetos han sido cedidos por el Museo de Navarra. La colección se completa con el retrato del primer pretendiente carlista, Carlos María Isidro, obra de Vicente López y cedido para cinco años por el Museo del Prado, así como las pinturas procedentes del Palacio de Navarra que muestran a Fernando VII, obra de Goya y a Margarita de Borbón, de César Muñoz-Sola.
Los primeros visitantes del museo han podido ver por fin con sus propios ojos la exposición, que ha permitido reunir en un mismo espacio físico piezas de relevante importancia para el carlismo que hasta ahora habían estado diseminadas entre diversas asociaciones y particulares, así como en el Museo Histórico Etnográfico de Bilbao, donde se encontraban buena parte de las piezas pertenecientes al legado histórico del Partido Carlista-EKA.
La llegada de fondos se ha disparado desde la apertura del museo, tal y como explica la responsable de esta infraestructura, Olaya Nagore. "Ahora empieza tal vez la labor más interesante, porque hay familias con tradición carlista que tienen piezas conservadas no en las mejores condiciones. El museo es un aliciente para que si lo desean las traigan y de hecho desde que se ha abierto hemos tenido consultas de personas que tienen fondos interesándose por este tema".
Profundizar El objetivo es que el museo sea algo dinámico y no estático, ya que no se trata sólo de mostrar los fondos, sino en profundizar en la historia de este movimiento. Según explican desde el departamento de Cultura del Gobierno de Navarra "este proyecto de museo y centro de documentación persigue el tratamiento del tema carlista con rigor científico, así como su difusión tanto al público general como al especializado". En esta misma línea se enmarca también la organización de las Jornadas de Estudio del Carlismo, que ya han cumplido tres ediciones y la creación a tal efecto de un Comité Científico. Uno de los miembros de este comité, Juan Pablo Fusi, indicó el martes en la presentación que "el carlismo interesa a muchos por la evocación de un pasado aún no olvidado. Como comité nos interesa como historia de España, de Navarra y de Estella como uno de los lugares paradigmáticos del carlismo, un movimiento decisivo en muchos momentos de la historia de los siglos XIX y XX. El museo contribuirá sustantivamente al conocimiento histórico".
Los contenidos de la exposición permanente se han organizado siguiendo el guión científico realizado por el citado comité. Basándose en este documento, la muestra cuenta con ocho áreas temáticas. La primera pretende empezar hablando del contexto histórico, tanto de España como del resto del mundo, con el nacimiento, frente a las revoluciones francesa y americana, de movimientos contrarrevolucionarios como el carlismo. Esta información contextual se inserta en un panel central que vertebra las dos crujías de la sala de exposición permanente. En este panel se van marcando hitos y sucesos importantes, tanto a nivel de España como internacional, empezando por ejemplo con la Enciclopedia, la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano o Napoleón.
Por su parte, en el centro de la sala se ha colocado un aspa carlista con cuatro brazos. En cada uno se insertan elementos relacionados con el lema Dios, patria, Rey. Por ejemplo, en el caso de Dios, aparece un devocionario de oraciones o el retrato del obispo de León. En lo que se refiere a Rey, en el aspa puede verse una reproducción de una moneda del primer pretendiente carlista autorizada por el Museo Arqueológico Nacional. Por último, la Patria se representa con varias armas. El aspa se completa con documentos de propaganda. "Se van utilizando a medida que avanza el movimiento", explica la directora.
Un apartado curioso del museo es el dedicado a la imagen de Carlos VII, ya que, como explica Olaya Nagore "nació fuera de España y no se le conocía mucho, por lo que hubo una auténtica campaña de merchandasing para dar a conocer su imagen, que aparecía en monedas, boinas, abanicos, polveras, sellos, retratos, etc".
Olaya Nagore indica que, a lo largo de la sala "se busca dar las claves para la comprensión del carlismo, ya que su larga duración hace que sea muy complejo. Se trata de adentrar a público no experto en este periodo".
En lo que se refiere a la exposición temporal, que se instalará de forma rotatoria en la planta baja del museo, se intentará, como explicó Nagore "ir tratando temas transversales en torno a esa época histórica que permita aprovechar las distintas posibilidades existentes en torno al carlismo".