madrid. El cantante y showman Luis Aguilé murió ayer a la edad de 73 años en un hospital de Madrid en el que estaba ingresado a consecuencia del cáncer que padecía. Aguilé falleció a las 13.30 horas en el Hospital de Sanchinarro y en el momento del deceso se encontraba acompañado por su familia, según explicó su sobrina Ana María Poncet.

El cantante llevaba ya cuarenta años afincado en Madrid, adonde llegó en 1963 tras hacerse famoso con su música en Latinoamérica, donde había grabado su primer disco a los veinte años. Siempre de buen humor, su colorido vestuario y en especial las corbatas multicolores y con estampados imposibles fueron siempre su sello de identidad, lo que, junto a su particular dicción, le convirtió en uno de los personajes más parodiados de la época, lo que incrementó aún más si cabe su popularidad.

Los programas de televisión de los 60 fueron para Luis Aguilé sus aliados, pues pronto destacó en ellos tanto por sus temas como por su personal estilo y humor. Así, en la televisión fue dando a conocer una ristra de canciones que alcanzaban una popularidad total y se convertían en la canción del verano, como La Chatunga, Juanita Banana, El tío Calambres, La banda está borracha, Con amor o sin amor, La vida pasa felizmente, Es una lata el trabajar.

"Cuando salí de cuba" Sin embargo, también compuso temas de contenido social, como Cuando salí de Cuba, compuesta en 1967, "un mensaje subliminal sobre lo que iba a ser una dictadura", en palabras del propio Aguilé refiriéndose a la Revolución cubana, o De hombre a hombre (1966) y Señor presidente, que tuvieron problemas de censura en algunos países de Latinoamérica.

También ejerció labores de actor y presentador de televisión en otros programas, sin descartar su faceta de escritor, ya que escribió varios libros para niños.

Tras estrenar en 1972 la comedia musical Una gran noche, presentó el programa de televisión Llegada Internacional, entre 1973 y 1974. Entre 1978 y 1979 volvió a televisión, presentando El hotel de las mil y una estrellas y en los años ochenta trabajó como asesor musical del programa Un, dos, tres... responda otra vez. Estos fueron algunos de sus últimos trabajos en televisión, ya que después sólo fue requerido por las televisiones en contadas ocasiones.

Durante la década de los noventa, estrenó el espectáculo Por las calles de Madrid, en el que mezclaba música y baile. En 1999 publicó Superfiesta, su último disco.

Desde entonces, permaneció alejado de los escenarios y tan sólo realizó pequeñas intervenciones en la televisión y galas musicales .

En la primavera pasada se le detectó un cáncer de estómago, que no consiguió vencer. "Ha sido muy digno en su enfermedad", señaló su manager y amigo durante los últimos doce años, Víctor Saboya, quien explicó que a Luis Aguilé le han faltado dos sueños por cumplir. "Le hubiera gustado ver en escena tanto un homenaje al poeta argentino José Hernández, más conocido como Martín Fierro, como la Zarzuela sobre Madrid", comentó Saboya.