Los responsables de Los Simpson nunca se han amilanado a la hora de tomar decisiones creativas arriesgadas y, de hecho, a lo largo de su extenso recorrido, ha mostrado la muerte de más de un personaje. No obstante, la última temporada ha ido más allá, atreviéndose a matar a alguien a quien los fans creían intocable, uno de los cinco miembros de la familia.

El capítulo final de la temporada 36, titulado Estranger Things, se centra en la relación de Lisa y Bart a lo largo de los años y cómo esta le preocupa a Marge, llegando a un 'flash forward' ambientado 35 años más tarde, con los hermanos ya adultos y su madre... observándolos desde el cielo (literalmente).

La serie de animación revela el futuro que le espera a la peculiar familia: Lisa prospera, Bart es el propietario de una residencia de ancianos sin licencia y Homer es viudo y se encuentra en un programa en Florida junto a sus amigos.

Insta a la familia a permanecer unida

En el episodio, los hermanos hablan de su fallecida madre y descubren una carta que esta les dejó por si moría antes que Homer y en la que les instaba a permanecer unidos. Bart y Lisa van entonces a Florida en busca de su padre mientras que Marge observa todo desde una nube y asciende de la mano de Ringo Starr.

Si bien es de esperar que la matriarca de los Simpson siga con vida al inicio de la próxima temporada, cuando se vuelva al tiempo habitual de la serie, conocer su muerte ha sido un duro golpe para los fans, ya que ha hecho canónico el hecho de que Marge no vivirá mucho más allá de los 70 años (si es que llega acaso a cumplirlos, pues su muerte podría producirse mucho antes dentro del periodo de 35 años comprendido por el salto temporal).