donostia - Mientras aguardaba a subir al podio como tercer clasificado de la general final, Gorka Izagirre reconoció que el desenlace de la París-Niza dejó en su boca un sabor “agridulce”. “Teníamos una ocasión perfecta para ganar la carrera, después de haber conseguido dejar atrás a Simon Yates”, aseguró el ormaiztegiarra, quien compartíría ceremonia con Marc Soler y con el propio Yates.
En una línea similar se expresó el director deportivo del Bahrain Merida, el esloveno Gorazd Stangelj. “Ha habido un momento en el que se nos ha presentado una oportunidad de oro. Ion y Gorka han arriesgado para aprovecharla y ha llegado la caída. Si no llegan a mostrar esa actitud, limitándose a seguir en el grupo de Wellens, Yates les habría alcanzado y el desenlace habría sido el mismo que el que ha terminado produciéndose”. Stangelj alabó asimismo cómo, tras el percance, los Izagirre hicieron “lo mejor que podían hacer en esas circunstancias”. “Termino muy satisfecho la carrera. Hemos peleado desde el principio en los primeros puestos de la general”, concluyó. - M.R.