El jueves, hacia las 21.30, volvieron los olores fétidos a Donostia. Hace bastante tiempo que no se producían. Pensaba que se había solucionado el problema pero no es así. He mirado en Internet y no he encontrado nada relevante sobre el tema. Hay algún acuerdo entre el Ayuntamiento Donostia-Gobierno Vasco y la papelera de Zicuñaga de Hernani, que era el lugar, parece, desde donde se originaba el olor. Uno de los productos químicos que usan en la empresa sería el causante. He registrado dos escritos, en el Gobierno Vasco y en el Ayuntamiento de Donostia, y una llamada al 092, donde me dijeron que habían recibido más llamadas por el mismo tema y que iban a enviar una patrulla por la zona. Solo espero que lo denuncie más gente, porque de lo contrario me temo que el olor no desaparecerá. El virus tiene un nuevo compañero de aventura.