Tras la muerte de Begoña Mujika Arregi el 18 de septiembre, su marido, hijos y hermanos queremos expresar públicamente nuestro agradecimiento a los doctores que en el marco de la "hospitalización domiciliaria" nos han dado tantas muestras de entrega incondicional.
Aprovechamos estas líneas para agradecer públicamente las bondades de dicho sistema de atención a domicilio, tanto para en enfermo, que se encuentra perfectamente atendido y en un entorno propio sin interferencias, como para sus familiares, que participan estrechamente en el proceso de la enfermedad sin mayores dificultades. Incluso, como en nuestro caso, si el proceso lleva a la muerte del enfermo, todos van preparándose más dignamente a tan luctuoso e inevitable desenlace.