¡El verano ya está aquí!: ¿adiós a la 'operación bikini'?

A las puertas del inicio de la temporada de verano, muchos darán por concluida un año más la operación bikini, en unos casos con mejores resultados que en otros. Sin embargo, los expertos señalan que, este proceso que arrancó con prisas hace unas semanas para perder unos kilos, no debería limitarse a un período de tiempo concreto.

Defienden que la operación bikini es un proceso exprés aislado y que frente a ella la prioridad debe ser incorporar al estilo de vida de cada uno hábitos saludables, duraderos y realistas a largo plazo. Además, seguir estos buenos hábitos de alimentación y ejercicio debe desvincularse siempre de la presión estética por meterse en un traje de baño de la talla más pequeña posible.

Por ello, Mar Santamaria, responsable de PromoFarma, explica que "sería mejor hablar de operación salud o de operación cuerpo en forma y no verla como un objetivo en sí mismo, sino como un proceso de afianzar hábitos saludables antes del verano... y después".

Alimentación y ejercicio

Existe evidencia científica sobre la importancia de alimentarse de forma saludable y de hacer ejercicio de forma regular, dos estrategias muy válidas que contribuyen a mantener el porcentaje de grasa, no de kilos, dentro de los parámetros saludables; la delgadez no siempre es signo de salud.

Y es que, hoy día, no es fácil ya que existe una constante contradicción relacionada con los hábitos alimenticios: mientras se vive en un entorno que propicia el exceso de peso con una ominipresencia de productos ultraprocesados, la presión estética por encajar en unos cánones a veces inasumibles persiste y se intensifica en el mundo real y virtual.

Esto lleva a parte de la población a poner en peligro su salud haciendo auténticas temeridades, como seguir dietas muy restrictivas sin supervisión profesional o consumir productos que prometen perder peso de una forma rápida y fácil. 

Consejos prácticos

Santamaria ofrece algunos consejos para que la 'operación bikini' se sustituya por un proceso de incorporación y afianzamiento de hábitos saludables a largo plazo con el objetivo de lograr un mayor bienestar y velar por lo que realmente importa: la salud.

Comprar alimentos sin etiqueta

Optar por aquellos productos ricos en nutrientes que no tienen marca, ni listas interminables de ingredientes, es decir, verdura y fruta directa del campo, legumbres a granel, pan de la panadería, pescado de la pescadería o huevos y carne de la carnicería, todos ellos alimentos muy poco procesados. 

Consumir productos de proximidad y de temporada

Son más ricos y económicos, lo que supone una garantía de sostenibilidad, sabor y ahorro, una forma más sana de comer y de cuidarnos.

Moverse

Muchas personas tienen trabajos y hobbies que les mantienen sentados buena parte del día. Por eso es importante levantarse, estirarse, desplazarse andando o en bici siempre que se pueda y reservar alguna hora a la semana para practicar ejercicio físico de mayor intensidad.

Ayuda profesional

Si existe una preocupación por el exceso de peso, se puede buscar orientación en un profesional de la salud. Es importante abordar los aspectos de nutrición, de estilo de vida o los psicológicos que requieran atención.

Adiós al mito de los 10.000 pasos

José Francisco Tornero, profesor titular de la Facultad de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte de la Universidad Europea, señala, por su parte, que para cuidarse no hace falta cumplir el mito de los 10.000 pasos diarios, sino que es suficiente con 5.000. Sin embargo, puntualiza que cuando se trata de adelgazar, hay que poner el acento en la velocidad de la caminata, porque es la que puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso. 

"Numerosas investigaciones han demostrado que quienes hacen caminatas de alta intensidad o rápidas (entre 6 y 8 km/h) pierden más grasa abdominal que quienes lo hacen a una intensidad moderada (entre 4 y 6 km/h) durante el mismo período de tiempo. Así, lo ideal es andar cada día entre 30 minutos y una hora a un ritmo rápido que no nos permita mantener una conversación sin que nos falte el aire", concluye.