Síguenos en redes sociales:

Mundial de balonmano: la igualdad y la emoción desaparecieron en cuartos

La gran favorita, Dinamarca, y una histórica como Croacia se citan en la final del Mundial de este domingo

[Fotos] Victoria de Dinamarca en la semifinal del Mundial de balonmano contra PortugalEFE

28

Dinamarca y Croacia, dos de las tres anfitrionas del Mundial de balonmano, se jugarán este domingo el oro tras derrotar a Francia y Portugal, que se disputarán la medalla de bronce, tras dos semifinales muy desiguales. 

La selección danesa fue anoche la última en conseguir el pase a la final. En realidad, a la primera a la que se esperaba. Desde los primeros compases del choque, en los que además Portugal ha acumulado minuto y medio con hasta tres jugadores menos, las rentas han quedado abiertas a favor de los del Norte para alborozo de la grada.

Incluso el jovencísimo Kiko Costa (19 años), que apunta a superestrella, ha perdido su aura de infalibilidad al marrar el siete metros que hubiera supuesto el 10-7.

Lejos del lleno

En un Unity Arena que parecía haber vuelto al año 1800, cuando Noruega aún pertenecía a Dinamarca, los daneses se han dejado a escuchar a miles ante los pocos centenares de seguidores portugueses.

Pese a quedarse lejos del lleno, uno de los grandes debes de la IHF y la organización de la cita, este multiusos de Baerum —localidad vecina de Oslo con una de las rentas más altas del país— presentaba con alrededor de 8.500 espectadores una entrada algo más acorde a la semifinal del Mundial.

El respetable ha celebrado todo tipo de jugadas, sobre todo cuando Portugal amagaba con acercarse, pero ni por esas: el 20-16 del descanso, con unos destacados Mathias Gidsel y Emil Nielsen, encarrilaba el pase a la final para los de Nikolaj Jakobsen. Aun así, el gol de mayor belleza ha corrido a cuenta de otro astro danés como Simon Pytlick.

Dinamarca machaca; Portugal a por el bronce

En la reanudación, otro parcial de 4-2 en cuatro minutos, incluso con inferioridad danesa, ha llevado al técnico portugués, Paulo Pereira, a frenar una sangría por la que se le iba la final. A estas alturas del Campeonato y con Dinamarca delante, la frescura y la ilusión solo no bastan: hacen falta una defensa y, sobre todo, una portería como la danesa, que cerró el duelo, en la figura de Emil Nielsen, en 38% de acierto y MVP del encuentro.

Como ya pasó con Brasil en los cuartos, Dinamarca también ha aniquilado la buena imagen que los lusos habían dejado hasta la fecha, con la gran prórroga contra Alemania. Con este factor y el partido del bronce a la vista, Pereira comenzó a rotar efectivos a lo largo de la segunda parte, lo que mostró a las claras lo que pensaba el técnico que podía rascar ante Dinamarca, que se llevó la cita por un resultado abultado (40-27) y buscará ganar su cuarto Mundial consecutivo.

Croacia, a la final; Francia, al diván

La Francia de Guillaume Gille, muy criticada por la cátedra de su país, ha evidenciado en este torneo que no basta con tener muy buenos mimbres. Que detrás del naufragio de los Juegos Olímpicos había algo más que sucumbir a la presión de semejante cita.

En Zagreb, le costó deshacerse de Egipto, a la que por momentos tenía bien domada, pero en los minutos decisivos, los faraones supieron manejar el escenario hasta el gol de Luka Karabatic a falta de tres décimas.

En el mismo escenario, pero dos días después, capituló ante una anfitriona lejos de ser la mejor Croacia jamás vista. Tenía, y tiene, algo que a Francia le ha faltado (27%): una portería con Kuzmanovic y Pesic (35%).

Sin centrales como Luka Cindric ni Igor Karacic, el equipo dirigido por el islandés Dagur Sigurdsson fue mucho más que Francia en una cancha que, con 15.600 asistentes, empujó de lo lindo.

Muy lejos

La última vez que Francia tuvo vida fue el empate a 3 que Konkoud firmó en el minuto 7. A partir de ahí, un ataque por momentos erráticos y una defensa desajustada dieron alas a una Croacia que siete minutos después ya doblaba a los galos (5-10). Solo un parcial de 2-0 a las puertas del descanso gracias a Minne maquilló una contienda que no tenía arreglo (11-18).

La reanudación lo evidenció: pese a acercarse en el marcador, a Francia le faltaba el punto decisivo para reducir aún más distancias y meter nervios en un rival que pese a manejar rentas de ‘solo’ cuatro goles ya en los últimos 10 minutos, le fueron suficientes para montarse como finalista en el avión a Oslo (31-28).

La final se disputará en el Unity Arena este domingo a las 18:00 horas (Teledeporte), mientras que Francia y Portugal pugnarán po rel bronce tres horas antes.