donostia - La final de la NBA tiene otra peculiaridad y es que en los banquillos se sentarán dos entrenadores que completan su primera campaña en la NBA. Tras varios años como atinado analista de televisión, Steve Kerr ha caído de pie en los Warriors, ha movido sus piezas con mucho criterio y les ha dotado de la solidez que les faltaba. Fue cocinero antes que fraile, ya que el técnico del conjunto californiano ganó anillos con los Bulls a la vera de Michael Jordan. De hecho, un tiro suyo sentenció la final de 1997 contra los Utah Jazz.
Por su parte, David Blatt ha tenido que ir salvando las reticencias que suponía su figura por llegar desde el baloncesto europeo. Pero el técnico israelí-estadounidense nacido en Boston puede lograr un hito histórico: proclamarse campeón de la Euroliga y de la NBA en años consecutivos. Su virtud, como en toda su trayectoria, ha sido mantener la calma e ir convenciendo a sus estrellas de la bondad de sus propuestas. Una vez que el equipo se estabilizó y LeBron James puso al entrenador de su lado, las victorias han llegado por su propio peso y Blatt ha cumplido con las expectativas creadas. Quizás es que no hay tantas diferencias entre un baloncesto y otro. - R. C. R.