Donostia. El Lagun Aro GBC quiere volver a probar el sabor del triunfo a domicilio en la cancha del Asefa Estudiantes, que sería el primero en la segunda vuelta, para empezar a mirar hacia arriba y olvidarse de los agobios por evitar el descenso. La última victoria antes del parón copero ante el Menorca puso fin a una racha de siete derrotas, incomprensibles si se tiene en cuenta la calidad que tienen los donostiarras, pero justificadas por la falta de confianza de la propia plantilla en sus posibilidades.
Ahora con los brazos más sueltos, al ver el descenso alejarse, jugadores como Jimmy Baron, David Doblas o Albert Miralles, que cumple 200 partidos ACB, están llamados a volver a desempeñar un papel importante en el pabellón de un equipo en progresión como es el madrileño, que lleva un mes casi intratable.
Al final, el Lagun Aro viaja con toda su plantilla tras recuperarse el propio Miralles y Javi Salgado de problemas físicos que comprometieron durante la semana su participación en un encuentro que se ve desde Donostia como el punto de apoyo para relanzar las opciones del equipo en la tabla. El rendimiento de los guipuzcoanos no es hasta la fecha para tirar cohetes cuando visitan otras canchas y sólo la fortaleza en Illumbe ha servido para corregir sus problemas como visitantes.
En la ida, los de Laso apabullaron a su rival, y hoy esperan lograr un triunfo que permitiría al equipo mirar a cotas más altas, tal y como indicó el técnico vitoriano .
En las filas del conjunto estudiantil causará baja en este partido el pívot venezolano Germán Gabriel por lesión.