Ni los llamamientos a la responsabilidad ni los distintos mensajes que han lanzado desde el Ayuntamiento de Donostia parecen hacer efecto en una pequeña parte de la población que sigue enrocada en propiciar momentos de tensión con los agentes de la Ertzaintza. La no celebración de Aste Nagusia en la capital guipuzcoana está dejando un reguero de detenciones por disturbios producidos durante la madrugada. Si el pasado martes eran dos los jóvenes detenidos por arrojar botellas a los ertzainas, la madrugada de este jueves han sido cinco los arrestados en similares circunstancias.
Según ha informado el Departamento vasco de Seguridad, cinco jóvenes, tres de ellos menores de edad, han sido detenidos tras arrojar botellas de vidrio contra "el dispositivo de agentes que vigilaba la Parte Vieja para controlar el cumplimiento de la normativa sanitaria frente a la COVID-19".
El enfrentamiento ha tenido lugar sobre las 3.00 hors, a la altura de la calle San Jerónimo, en confluencia con otras vías de la Parte Vieja donostiarra, escenario también de las protestas de días anteriores. Según señalan desde Seguridad, "unos jóvenes han recogido botellas de vidrio de las basuras existentes en el lugar y han lanzado los objetos contra la línea policial de manera insistente".
Los arrestados, que serán puestos a lo largo de esta mañana a disposición del Juzgado de Guardia de Donostia, tienen 16 y 17 años (dos), los menores; y 18 y 21 años los otros dos detenidos.
