- La sala Patio de Tabakalera acogió ayer el acto inaugural del 50º aniversario de Aspace Gipuzkoa, un evento en el que estuvieron representados los cuatro pilares fundamentales de la asociación: personas usuarias, familias, profesionales y voluntarios. Con esta celebración se dio comienzo a la campaña Unidos somos + capaces, que estará presente en toda Gipuzkoa hasta octubre de 2022.

Aspace fue creada en 1971 por la voluntad de un grupo de padres que trabajaron para lograr que niños y niñas con necesidades especiales recibieran un tratamiento ajustado a sus discapacidades. "El tesón y el esfuerzo de aquellas primeras familias que decidieron trabajar para mejorar la calidad de vida de sus hijos ha servido para que posteriores generaciones de familias hayamos podido encontrar en Aspace Gipuzkoa el acompañamiento y el apoyo que hemos necesitado en las distintas etapas de la vida de nuestros hijos", explicó la presidenta de la asociación, Elisa Carmona.

Según la presidenta, el objetivo de la asociación siempre ha sido luchar por la inclusión social de las personas con parálisis cerebral. "El ejercicio de los derechos por parte de las personas con parálisis cerebral y su inclusión real en la comunidad, participando como ciudadanos de pleno derecho, es nuestro camino a seguir, y en ello os queremos implicar a todos: a los grupos de interés de la asociación, a las instituciones y la sociedad en general", destacó Carmona.

Hoy en día, Aspace Gipuzkoa atiende a 472 personas con parálisis cerebral, y cuenta para ello con 340 profesionales y 126 personas voluntarias. La distribución geográfica de los quince centros de la asociación en once municipios del Territorio -Andoain, Arrasate, Beasain, Bergara, Eibar, Eskoriatza, Donostia, Irun, Tolosa, Urretxu y Zarautz- permite que la atención se realice en un entorno lo más cercano posible a los domicilios familiares.

Algunos integrantes de esa gran familia también quisieron participar en el acto de ayer: la profesional Lourdes Kerejeta; el usuario Mario Rodriguez; Estitxu Otxoteko, la madre de una usuaria; y la voluntaria Rosabel Ausín.

Estitxu Otxoteko tiene una hija de siete años con parálisis cerebral. De cara al futuro, desea que la vida de su hija esté "protegida". "Me gustaría que mi hija tuviera garantizada una vida digna, y para ello se necesita una estructura de protección desarrollada y blindada para siempre. Me refiero a que se sienta arropada cuando tenga una casa, cuando trabaje, en el ámbito de la salud... es decir, necesitan tener un montón de oportunidades adaptadas a sus capacidades", indicó Otxoteko.

Por su parte, el usuario Mario Rodríguez explicó qué significa para él ser capaz. "Ser capaz es ser uno mismo más allá de las dificultades físicas. Creer en uno mismo y transmitir a la gente que estamos vivos. Somos capaces de muchas cosas y la gente tiene que ver más allá de nuestras sillas de ruedas, muletas y dificultades físicas que tenemos", destacó.

Lourdes Kerejeta comenzó a trabajar en Aspace cuando era muy joven y según ella, depende de todos que Aspace siga escribiendo su historia. "Todos tenemos que ser los protagonistas de esto. Entre todos podremos llevar a cabo nuevos proyectos con fuerza e ilusión. Por parte de la sociedad se han hecho muchas cosas y hemos mejorado bastante, pero todavía hay tareas pendientes; sobre todo, relacionadas con la inclusión. Me parece que para mejorar la inclusión necesitamos el apoyo de toda la sociedad porque si no, no podemos seguir adelante", recalcó Kerejeta.

Por último, Rosabel Ausín fue preguntada por el motivo que le empuja a hacer el trabajo voluntario en Aspace. "Cuando empiezas a probarlo, continúa siendo como una adicción y termina siendo una necesidad. Te da un chute de buen rollo y de alegría, y eso es muy importante para la vida. Además, nos da la posibilidad de entablar una relación con diferentes, que luego no son tan diferentes, porque todos tenemos los mismos problemas, las mismas ideas, las mismas ilusiones, y sobre todo compartimos muchísimos sueños con ellos. También nos da la posibilidad de apostar por el futuro, y yo estoy súper orgullosa de poder participar en este grupo con todos mis compañeros. Tanto los usuarios como los voluntarios somos al final como un equipo de amigos", explicó Ausín.

Durante el acto, también se les hizo un pequeño homenaje a las personas que fundaron Aspace, entregándoles un obsequio a ellas mismas o a sus familiares.

Por último, tomó la palabra Iñigo Urkullu, que abogó por promover la autonomía personal de los ciudadanos, "procurar que tengan una vida digna, plena, de calidad y sea lo más independiente posible, con sus derechos garantizados", e impulsar la integración socio laboral para garantizar un modelo de vida independiente. "Una sociedad es realmente próspera cuando todas las personas pueden acceder, en igualdad de condiciones, a la educación, la formación, el trabajo, los bienes culturales o de ocio", añadió.

Junto a Urkullu también estuvieron presentes un gran número de representantes institucionales como Bakartxo Tejeria, presidenta del Parlamento Vasco; Eneko Goia, alcalde de Donostia; Jokin Bildarratz, consejero de Educación; Gotzone Sagardui, consejera de Salud; Beatriz Artolazabal, consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales y Maite Peña, diputada de Políticas Sociales.

"Me gustaría que mi hija tuviera una vida digna, y para ello se necesita una estructura desarrollada"

Madre de una usuaria de Aspace

"Somos capaces de muchas cosas y la gente tiene que ver más allá de nuestras sillas de ruedas"

Usuario de Aspace

"Me parece que para mejorar la inclusión necesitamos el apoyo de toda la sociedad"

Profesional de Aspace

"Tanto los usuarios como los voluntarios somos al final como un equipo de amigos"

Voluntaria de Aspace