- La consejera de Salud, Gotzone Sagardui, aseguró ayer que la atención en verano en los centros de salud “no desaparece” sino que se “reduce en unas horas” porque baja la demanda, algo que sin embargo no sucede con la campaña de vacunación contra el covid, donde se están poniendo “todos los medios”.

Sagardui respondió así en el Pleno de control de ayer en el Parlamento a preguntas de los parlamentarios de Elkarrekin Podemos-IU Jon Henández y de EH Bildu Rebeka Ubera.

El primero criticó los “recortes estivales” que hace “todos” los veranos Osakidetza, que en su opinión perjudican derechos básicos de la ciudadanía y que en esta ocasión son “particularmente graves” porque con el covid se han acumulado meses de retrasos.

La segunda afirmó que se puede entender que haya que hacer “ajustes” pero opinó que lo que se plantea este verano va “más allá”, se produce en un momento “delicado”, y habló de “cierres de consultas” y del “desmantelamiento” de la atención primaria con una centralización de servicios en los hospitales que perjudica a los pueblos y a los barrios.

La consejera insistió en que el cuidado de la salud de la ciudadanía en verano sigue garantizado pero que la gestión debe adecuarse a la realidad de la demanda y “no es aconsejable” mantener la misma intensidad en la prestación de los servicios cuando esta se reduce en consultas de atención primaria al menos en un 33% en época estival.

También dejó claro que donde se exige un “esfuerzo extraordinario” es en la campaña de la vacunación contra el covid. “Ahí estamos poniendo todos los medios, no se reduce el servicio porque no se reduce la demanda”, insistió. La consejera reconoció que “a lo sumo” en verano se “reordenarán los puntos de vacunación para ser más eficientes ante la previsión de llegada de mayor número de vacunas” que, según señaló, espera que se administren “al mismo tiempo” que se reciben.

Respecto a los horarios estivales en los centros de salud, explicó que los que abren de 8.00 a 20.00 horas verán adelantado el cierre a las 17.00 horas, y los que están abiertos entre las 8.00 y las 17.00 horas, cerrarán a las 15.00 horas. “No desaparece la atención, se reduce en unas horas ajustando la demanda”, resumió.

El Departamento de Salud detalló en una nota que fuera del horario de apertura la asistencia sanitaria estará garantizada en los puntos de atención continuada, que se reforzarán en las zonas con una mayor afluencia de veraneantes.

También informó de que los centros de Osakidetza están retomando la normalidad en la atención después de las medidas de seguridad adoptadas por la pandemia que ha obligado a priorizar la atención telefónica. En la actualidad el 44% de las citas que se ofertan en atención primera son presenciales.

La consejera remarcó que en verano quiere que el personal descanse, que el servicio se mantenga ajustado a la demanda real y también contratar personal de sustitución.

En este aspecto insistió en que no es una “excusa” decir que no hay tanto sustituto como le gustaría, sino una realidad. “El compromiso de Osakidetza para cubrir las ausencias a lo largo de este verano es firme y por ello contrataremos allí donde sea necesario siempre que exista personal disponible”, aseguró la consejera.

Primera franja horaria. Los centros de salud en horario habitual de 8.00 a 20.00 horas pasarán a estar abiertos durante el verano de 8.00 a 17.00 horas

Segunda franja horaria. El horario de atención de los centros de salud también se modifica en aquellos que están abiertos desde las 8.00 a las 17.00 horas. En estos casos, durante el verano pasarán a estar abiertos desde las 8.00 a las 15.00 horas.

“El compromiso de Osakidetza para cubrir las ausencias a lo largo del verano es firme”

Consejera de Salud