Mientras el 80% de la población guipuzcoana lleva desde medianoche confinada en su municipio, Andoain, que ya tiene una tasa superior al límite que establece la adopción de medidas más restrictivas, se ha librado por un día de padecer esta situación. Ha sido en el boletín que este martes ha hecho público el Departamento de Salud del Gobierno Vasco cuando oficialmente el municipio de Buruntzaldea ha superado esta tasa hasta llegar a una incidencia acumulada de 406,99 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días. De este modo, no será hasta el próximo martes cuando, de seguir así, engrosará la larga lista de municipios con restricciones: un total de 45 que representan al 80,7% de la población45 que representan al 80,7% y entre los que se encuentra Donostia, cuya tasa es ya de 498,93 tras sumar 75 nuevos positivos en la última jornada.

La curva de contagios de Gipuzkoa se sitúa, con los nuevos datos referentes a este lunes, en 618,19 casos, lo que supone un incremento respecto al día anterior de un 3,5%. Sube, pero lo hace de manera más leve que días anteriores -sin tener en cuenta los datos del domingo que siempre son inferiores porque se realizan menos PCR-. Aún así, sigue siendo una tasa muy alta, tanto que hay que remitirse a finales de octubre del pasado año para hablar de cifras similares, después de que este fin de semana se rebasara el pico de la tercera ola (587,13 casos el 3 de febrero).

Es probable que en los próximos días algún otro municipio de más de 5.000 habitantes se incorpore también a la zona roja por su alta incidencia. Es el caso de Bergara (392,39 casos), Irun (388,65) y Usurbil (396,32), mientras que, en sentido contrario, la evolución de la tasa de Ordizia (427,01 casos), donde en el último día se han diagnosticado dos casos, hace prever que podría ser el primer municipio de más de 5.000 habitantes en abandonar la lista de localidades en rojo.