- Entre los muchos sectores que se han beneficiado durante esta pandemia, se encuentran aquellas empresas dedicadas al transporte de mercancías o paquetería. Con el confinamiento domiciliario primero, y con las distintas restricciones más tarde, el hecho de acudir a las tiendas se ha complicado sobremanera. Por ello, cada vez son más los que optan por realizar sus compras a través de Internet. Roberto Grañas es responsable de operaciones de Gipuzkoa Kargo Express, una compañía dedicada al transporte y almacenaje de todo tipo de mercancías. Con más de 18 años de experiencia en el sector, Grañas vio como de un día para otro se disparó la demanda al inicio del confinamiento y tuvieron que ponerse manos a la obra para ofrecer todo tipo de servicios.

¿De qué manera les ha cambiado la forma de trabajar la pandemia?

-Hemos sufrido muchos cambios en la forma de manejar las mercancías y en los protocolos de entrega. Al principio, los clientes le tenían miedo y un gran respeto al covid, por lo que la relación con los compradores o las empresas se hacía de forma más responsable. Intentamos que haya el menor contacto entre el repartidor y el comprador, por eso dejamos los paquetes delante de los receptores para que sean ellos los que los cojan. Últimamente, sin embargo, ese miedo se ha disipado un poco.

¿Cómo fue el hecho de trabajar durante el confinamiento de marzo?

-- Se produjo un boom en las compras. Parecía que estábamos en Navidades, la demanda aumentó entre un 20% y 30%. Sobre todo, notamos una gran subida en el e-commerce o en los productos que adquirimos desde nuestras casas. La gente empezó a comprar cosas muy curiosas como bicicletas, televisores, máquinas para hacer fitness, etc. Además, estuvimos llevando a casa las bolsas de la compra de forma gratuita a la gente mayor.

¿Qué efecto notó durante el segundo confinamiento de noviembre? ¿Hubo una evolución parecida a la del primero?

-Las compras no aumentaron tanto como en el primero, pero se notó que la gente ya se había acostumbrado a hacer las compras por Internet. Fundamentalmente, percibimos un gran aumento en el servicio a domicilio de los restaurantes y bares, que tuvieron que cerrar sus puertas. Al final todo ha cambiado desde marzo a hoy en día, a excepción de la logística.

¿En qué situación está el flujo de mercancías en esta tercera ola?

-Se está estabilizando. No ha explotado tanto como durante el primer confinamiento, pero sí que sigue estando por encima de lo normal. Una vez más, hemos tenido un gran aumento en el servicio a domicilio de bares y restaurantes, prácticamente la demanda se ha triplicado. En cuanto al comercio electrónico, la tendencia se ha mantenido, no es tan exagerado como antes. Además, en las pasadas Navidades nos ha costado menos encontrar gente para reforzar la plantilla, seguramente porque hay más gente sin empleo.

¿Se puede decir que las restricciones os están beneficiando ya que la gente compra más por Internet?

-Sí que se nota. A diferencia de antes, ahora el comprar por Internet se ha normalizado y en muchos casos son siempre los mismos los que compran. Se puede decir que en esta pandemia la gente ha descubierto que se puede ir de compras sin salir de casa.

¿Qué tipo de productos se están comprando más en los últimos meses?

- Ropa sobre todo. También hemos registrado un aumento en la compra de electrodoméstico de gama blanca como lavavajillas o lavadoras.

¿Cree que pueden salir beneficiados de esta pandemia?

- La verdad es que estamos trabajando bien, no nos podemos quejar. A principios de año hemos acusado una pequeña bajada, pero es algo normal después de las Navidades. En cuanto a la paquetería, sí que es verdad que las empresas grandes se han comido a otras más pequeñas.