El Gobierno Vasco ha dado permiso a la incineradora de Zubieta para quemar residuos industriales, según ha señalado esta mañana Arantxa Tapia, consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, en una entrevista en Euskadi Irratia.

Desde el derrumbe del vertedero de Zaldibar hace poco más de un año y el cierre de infraestructuras como la de Lurpe, en Mutiloa, que sirvieron para dar una solución provisional al destino de residuos inertes, Euskadi, en general, y Gipuzkoa, en particular, se vieron con un problema para hacer frente a la gestión de residuos procedentes de las empresas industriales.

La falta de infraestructuras es probable la base sobre la que se sustenta la decisión del Gobierno Vasco y de la viceconsejería de Medio Ambiente que ha autorizado a GHK el tratamiento de residuos industriales en la planta de Zubieta.

Según ha manifestado Tapia, no se trata de "quemar" sin más los residuos, sino de "valorizarlos" para "generar energía", que "es diferente", recalcando que son residuos que no se pueden ni reciclar ni reutilizar.

Tapia también señaló que el año pasado la cantidad de residuos industriales que se generó en el País Vasco fue notablemente menor, de 800.000 toneladas frente a las 1.200.000 de una situación normal. De estas, "no llega al 10% el porcentaje de residuos que se han enviado fuera" de la CAV, de hecho, concretó que ese porcentaje se sitúa en torno al 5-7%.