- El Gobierno catalán dio ayer un paso atrás y volverá a cerrar centros comerciales y gimnasios y establecerá el confinamiento municipal a partir del jueves 7 y durante diez días para intentar frenar el auge del coronavirus, mientras comienza a vacunar a profesionales sanitarios al mismo tiempo que a los ancianos en las residencias.

La consellera de Salud, Alba Vergés, explicó esta "nueva parada social y de país" para tratar de "mantener al virus a raya", para lo cual también ha acordado cerrar todas las tiendas no esenciales de más de 400 m2 y que durante los fines de semana solo abrirán los comercios esenciales. Las nuevas restricciones incluyen un confinamiento perimetral municipal cada día, con las excepciones habituales: ir a trabajar, al colegio, al médico o cuidado de personas mayores.