- Cada uno de los 67 jóvenes que participaron en una fiesta ilegal en la madrugada del martes en una hospedería de un convento de Derio se enfrenta a cinco sanciones administrativas por haber infringido los límites de movilidad, de horario, del número de personas que se pueden congregar, las distancias interpersonales y el uso de mascarillas. Según informó el viceconsejero de Seguridad, Josu Zubiaga, los identificados también podrán ser objeto de diligencias penales porque los propietarios de la hospedería presentaron denuncias por destrozos en el inmueble. Aunque los gestores de la hospedería negaron que supieran el número de personas que iba a estar en el inmueble y con qué fin se iba a utilizar, la Ertzaintza analiza si es así y si estos cumplieron todos los requisitos administrativos que se exigen. Ante el hecho de que los tribunales estén anulando multas por saltarse el estado de alarma, Zubiaga recordó que los jueces alegaron que hay que tener en cuenta la evolución social a la hora de aplicar las normas.

“Creo que, en este caso, la inmensa mayoría de la sociedad está por que se cumplan estas normas que son para preservar la vida de la ciudadanía. Y, en este caso, lo que la ciudadanía opina es que no se puede poner en riesgo la vida de las personas sin que tenga su correspondiente sanción”, apuntó.