- Es más necesaria que nunca pero no se podrá hacer como en años anteriores. Lo impide el COVID-19. La gran recogida del Banco de Alimentos volverá a realizarse en noviembre, aunque no será de forma presencial, no habrá que llevar la botella de aceite o el paquete de garbanzos al puesto de los voluntarios, sino que la colaboración se efectuará por medio de la adquisición de bonos de distinto importe.

Todavía no se ha fijado la fecha de la campaña, que se prolongará durante una semana, aunque será, con casi total seguridad, la semana anterior o posterior al fin de semana del 21 y 22 de noviembre.

Este año el Banco de Alimentos marchará de la mano del Colegio Oficial de Enfermería de Gipuzkoa (COEGI), que además de poner cara a la campaña, le asesorará en distintos aspectos.

La presidenta el Banco de Alimentos de Gipuzkoa, Belén Méndez de Vigo, explicó ayer a este periódico que en 2020 la solidaridad es más necesaria que nunca. “Durante el confinamiento y después, aumentó un 20% la demanda de alimentos, sobre todo entre las personas que trabajan al día. Pero calculamos que seguirá subiendo hasta un 30%, porque hay mucha gente que sigue sin trabajar”.

Estas cifras, informa, son comparables a las de la crisis de 2008. “Luego bajamos mucho. Nosotros cuanta menos demanda tenemos, más contentos estamos y ahora está subiendo”, destaca la presidenta del Banco de Alimentos.

Ya en campañas anteriores se activó la opción de los bonos, aunque se combinaba con la recogida in situ. Este año la segunda posibilidad desaparecerá para evitar concentraciones de personas a la hora de depositar los alimentos.

Pero esta no es una decisión que el Banco de Alimentos haya tomado de forma irrevocable ya que, según explicó Méndez de Vigo, “volveremos a hacerlo cuando se pueda, porque, entre otras cosas, la recogida tiene un importante componente pedagógico”.

“Otros años, cuanta más gente se congregaba, más contentos estábamos. Ahora no, no queremos contribuir al dolor”, añade. Pese a todo, habrá presencia de voluntarios del Banco de Alimentos y del COEGI para explicar la forma en la que funciona la campaña.

En pasadas ediciones, cuando la colaboración para la promoción de bonos se realizó con las cadenas Eroski y Uvesco, estos eran de tres, seis y nueve euros. En la campaña 2020, con la participación de más cadenas de supermercados, se ampliará el abanico, con bonos de menor y mayor importe que se podrán adquirir en las cajas. “No depende de nosotros, sino de los sistemas de cada cadena”, apunta.

Méndez de Vigo, que se mostró convencida de que la sociedad guipuzcoana responderá a la convocatoria con la misma solidaridad que siempre lo ha hecho, asegura que con los vales el Banco de Alimentos podrá realizar una gestión más eficiente de los productos.

Los vales funcionan en cierta forma como un crédito y los supermercados, que tendrán registrado el importe recolectado con los bonos, irán enviando al Banco de Alimentos los productos que vayan necesitando a lo largo del año, según se los vaya pidiendo.

De este modo, abunda Méndez de Vigo, se facilita la tarea de recogida y de clasificación, ya que también en su almacén se está racionalizando la presencia de voluntarios para evitar posibles contagios, y se contribuye a que los productos no caduquen.

“Nos pasaba, por ejemplo, con la leche. Recogíamos miles de litros y teníamos que estar pendientes de las fechas de caducidad. Dedicábamos mucho tiempo a la clasificación y de este modo será más fácil”, afirma.

“Necesitamos tener la mayor visibilidad posible, que este año hace mucha falta, y es más difícil sin la recogida de alimentos en los supermercados”, destaca la presidenta del Banco de Alimentos, que agradece que incluso en los momentos en los que la movilidad estaba condicionada, han seguido recibiendo “muchísimas contribuciones a través de nuestra web y la cuenta que abrimos. La respuesta fue increíble, como siempre”.

El COEGI ha querido responder a la llamada del Banco de Alimentos que, de este modo, quiere “rendir un merecido homenaje” a unas profesionales que lo están dando todo.

Además, aunque se hayan adoptado distintas medidas en la sede del Banco en aras a evitar contagios y trabajar con seguridad, el profesional asesoramiento del COEGI está contribuyendo a que dicho trabajo se desarrolle con más garantías. “Observarán las condiciones en las que trabajamos para ver si se puede mejorar en algo”, subraya.

“También durante la recogida estarán allí, con sus petos del Colegio de Enfermería dando la cara con nosotros e informando ”, apunta Méndez de Vigo.

La presidenta del Banco de Alimentos estuvo ayer en la presentación de la campaña acompañada por su homóloga en el Colegio Oficial de Enfermería de Gipuzkoa, Pilar Lekuona, que agradeció que la labor de este colectivo sea destacada en la presente edición. Además, quiso poner en valor el trabajo que lleva a cabo el Banco, “una labor que reconocemos y apoyaremos en todo lo que sea necesario”.