-¿En qué situación se encuentra la gestión de los residuos de Gipuzkoa?

-La planta de valorización energética tiene todos los parabienes administrativos, todas las autorizaciones. Ahora estamos en la última fase de pruebas, en el sentido de que hasta que los técnicos de GHK no digan que se cumplen todos y cada uno de los parámetros que figuran en el contrato, no se pone en marcha oficialmente. Lo que sí hay que decir es que la planta está funcionando bien. Nos quedan unas semanas para poder hacer la puesta en marcha y el inicio de operación. Una vez que ese procedimiento se lleve adelante, en unas semanas empezará el tratamiento totalmente normalizado de la planta. Entendemos que para comienzos de octubre estaremos en esta situación.

¿Qué es lo que está impidiendo que no se esté operando al 100%?

-En cualquier proceso de obra, hasta que los técnicos no digan que todo está acorde a los requerimientos contractuales, no se puede dar el visto bueno, pero no hay un problema importante.

El transformador eléctrico ha vuelto a incendiarse por segunda vez.

-Es un transformador de la marca ABB, una marca de primerísimo nivel internacional. Es una avería que en las próximas semanas estará totalmente resuelta. Es una avería técnica y fortuita.

¿Cómo ha afectado esta avería al funcionamiento de la planta?

-Se están empleando otras medidas alternativas auxiliares. Había otro transformador desde el periodo de obra y, si fuera necesario, se pondrá algún otro grupo electrógeno adicional. Con estos equipos auxiliares se está trabajando con total normalidad.

¿Para cuándo podemos hablar de que Zubieta estará oficialmente operativo al 100%?

-Va a ser cuestión de muy pocas semanas. Además, la concesionaria está muy interesada en que la puesta en marcha se haga lo antes posible y nosotros seremos los garantes de que se cumplen todos los procedimientos que se recogen en el contrato. No tenemos prisa para dar ese visto bueno, pero va a ser cuestión de semanas porque las pruebas están saliendo muy bien.

Con Zubieta construido, Gipuzkoa ha dejado de exportar residuos.

-En estos momentos se está tratando todo en Zubieta. Gipuzkoa ya no tiene vertederos para residuos sólidos urbanos y todo hay que tratarlo en Zubieta. Es verdad que tenemos que tener la garantía de contingencia y el acuerdo lo hicimos con Bizkaia para que en un momento dado puedan auxiliar cualquier contingencia que se genere. Ese tipo de convenios y buenas relaciones se van a mantener porque nunca se sabe qué va a suceder, pero no se contempla mandar residuos fuera de Gipuzkoa.

En mayo hubo una fuga de amoniaco que causó graves daños medioambientales en una regata de la zona. No parece la mejor forma de comenzar.

-Efectivamente, es una mala noticia porque ha habido una afección al medio ambiente y eso hay que evitar que suceda aquí o en cualquier otro sitio. Es verdad que desde el Consorcio se actuó con celeridad, porque tan pronto como se supo la existencia de esta incidencia se abrió un proceso de investigación interno, se ha determinado cuáles han sido las causas que han posibilitado este hecho y se han subsanado. Además, se ha aplicado la correspondiente multa de 45.000 euros a la empresa concesionaria por no avisar de la incidencia, por tener algún dispositivo en mal funcionamiento y por el daño causado. Me parece correcto que se haya calificado este hecho como grave. Lo que hay que hacer es lo que se ha hecho, investigar, acreditar lo que ha sucedido y sancionar.

¿Se han reforzado los controles de para que no vuelva a suceder?

-Se va a protocolizar todavía con más rigurosidad y a la concesionaria se le va a exigir que esto no vuelva a suceder.

En el otro lado de la balanza están los datos de análisis del aire, que han concluido que no hay afección a la atmósfera.

-Es un dato importantísimo porque pone de manifiesto que esta es una instalación que dadas las emisiones que se han producido, no solo es una gestión responsable y eficiente con el medio ambiente, sino que de las plantas existentes en estos momentos en Europa, es la que menos emisiones tiene. Es una planta muy poco contaminante que da una solución integral y definitiva a la gestión de los residuos. La alternativa es el vertedero.

En los últimos meses, además de dejar atrás la confrontación política, también se ha abandonado la judicial, con una de cal y otra de arena para GHK

-Los procedimientos judiciales por el primer proyecto de incineradora han dado dos sentencias bastante contradictorias entre sí, una la del Tribunal de Cuentas y otra la del Supremo. La sentencia del Supremo es firme y habla de desviación de poder. La sentencia del Supremo nos obligaba a tomar una determinación de si había responsabilidades patrimoniales por parte de aquellos que tomaron la decisión de la paralización. Hubo una desviación de poder, usurparon una función que le correspondía a las Juntas Generales y desde el punto de vista político esa es una condena lapidaria para el mundo de Bildu, porque se actuó en contra de los principios fundamentales de la democracia. Dicho esto, se abrió una comisión para determinar si había o no una responsabilidad patrimonial y esta comisión ha determinado que no se puede demostrar que esa decisión se tomara con dolo o responsabilidad desde el punto de vista individual. Otra cosa son las consecuencias políticas, que son inexcusables.

Con el problema de la gestión de los residuos urbanos encauzado, el colapso del vertedero de Zaldibar ha puesto sobre la mesa otra cuestión: la gestión de los residuos industriales.

-Es un tema importantísimo y más en un territorio absolutamente industrial como es Gipuzkoa. A diferencia de lo que pasa con los residuos urbanos, los residuos industriales son responsabilidad de cada industria, pero con el derrumbe de Zaldibar y el cierre de otros vertederos se da un déficit de infraestructuras y eso afecta a la actividad económica. Hay que darle una solución.

¿Con qué tipo de infraestructuras?

-Con aquellas plantas de tratamiento que valorizan, que recuperan materiales y que hagan que no acabemos depositando todo en un vertedero. En la industria actualmente se recuperan aproximadamente el 50% de los residuos, queda otro 50%. Habrá situaciones en las que no se pueda y habrá que darles solución, pero siguiendo las estrategias de economía circular que se han impulsado desde el Gobierno Vasco y también desde la Diputación de Gipuzkoa. Hay que impulsar actividades e infraestructuras en ese ámbito: generar nueva economía a través de la economía circular. La competencia no es de la Diputación ni del Consorcio, pero estamos para ayudar. Estamos por la labor de que se impulse la ley vasca de residuos y seguramente en algún momento podremos compartir infraestructuras. Porque muchas veces el origen de los residuos no es lo que determina, sino la tipología de los mismos.

¿Zubieta puede ser el destino de esta tipología de residuos?

-Zubieta está pensado para dar tratamiento a los residuos sólidos urbanos y tiene una capacidad límite de tratamiento. Pero solo tenemos la planta de valorización energética, tenemos una planta de tratamiento mecánico-biológico, una de biometanización, dos plantas de separación de envases en Urnieta y Legazpi, plantas de compostaje€ El modelo de Gipuzkoa es de valorización, de no vertederos y, a partir de ahí, no somos competentes, pero estamos a disposición del Gobierno Vasco y de quienes sean competentes.

Azkoitia prohibió en verano la apertura de una instalación de tratamiento en el municipio, algo que fue muy criticado por usted.

-Estábamos hablando de una planta de RCD, residuos de construcción y demolición. No son materias contaminantes y necesitan una solución. En vez de terminar nuevamente en un vertedero, tenemos plantas en Gipuzkoa para que se revaloricen. Hacen falta plantas de este tipo. Cada Administración sabrá, pero como territorio responsable tenemos que posibilitar estas actividades que son limpias, de economía circular y que facilitan la reutilización y el reciclaje.

"Con el transformador de la incineradora ha habido una avería técnica y fortuita que en las próximas semanas estará totalmente resuelta"

"Se va a protocolizar todavía con más rigurosidad y a la concesionaria se le va a exigir que esto -fuga de amoniaco- no vuelva a suceder"

"Hay una condena lapidaria del Supremo para Bildu porque usurparon una función que correspondía a las Juntas Generales"

"Con el derrumbe de Zaldibar y el cierre de otros vertederos se da un déficit de infraestructuras y eso afecta a la actividad económica"