Euskal Trenbide Sarea apunta a dos causas principales que han provocado que la obra del Topo entre Miraconcha y Easo vaya a sufrir un "importante" sobrecoste. Por un lado, la aparición de arenas a gran profundidad en la zona de Easo y por otro lado, las filtraciones de agua en la zona de la calle Zubieta que supusieron el descalce de un edificio.

Primero, las arenas a gran profundidad halladas en la zona de Amara, lo que llevó a aplicar un nuevo sistema constructivo conocido como Jet Grouting, que se trata de una "técnica de alta presión para tratamiento de suelos poco compactos, mezclándolo y sustituyéndolo por cemento. De esta forma se mejora la capacidad resistente del terreno".

Y el segundo, conocido en junio, fueron las filtraciones que se dieron en el subsuelo de la zona de la calle Zubieta, una "afluencia imprevista de aguas" provocada por la "discontinuidad del terreno", según explica Euskal Trenbide Sarea en su nota de este viernes. Esas filtraciones generaron "el descalce de un edificio en el paseo de La Concha" y desde entonces "se están aplicando inyecciones de lechada de mortero para consolidar el terreno".

Soluciones que, apunta ETS, provocan un sobrecoste incompatible con la actual Ley de Contratos del Sector Público y que recomiendan la rescisión de la actual adjudicación, la redacción de un nuevo proyecto y la posterior licitación para que las obras se puedan "reanudar a pleno rendimiento hacia el mes de mayo”.