- El consejero de Educación, Jokin Bildarratz, analizó ayer en una rueda de prensa en Gasteiz el desarrollo de las reuniones celebradas con agentes de la comunidad educativa y con los sindicatos, que han convocado una huelga para el martes 15 en demanda de un regreso a las aulas "seguro y consensuado" tras la suspensión de las clases presenciales por la pandemia de coronavirus.

Para el consejero, la convocatoria de huelga del próximo martes "no aporta nada al sistema educativo" y aseguró que "quien más sufre" esta convocatoria es "el más débil", porque "a todas aquellas familias desestructuradas, a los jóvenes alumnos y alumnas que tienen entornos complicados, verdaderamente esta huelga no les ayuda en nada".

"¿Esta huelga nos va a dotar de más seguridad?; ¿Esta huelga nos va a dotar de más recursos? No nos dota de nada de eso. Por eso, ayer (por el jueves) les ofrecí a los sindicatos diálogo", explicó. Bildarratz destacó que a las 48 horas de jurar su cargo mantuvo diez reuniones con los diferentes sectores para trasladarles que su "actitud" es la del "diálogo".

"Cuando hablo de diálogo, estoy hablando de llenar de contenido una serie de compromisos que hemos puesto encima de la mesa, como pueden ser la contratación de 1.000 profesionales o la garantía del servicio de comedor o la gestión de la aportación económica de 87,2 millones más", explicó, antes de insistir en que, en estos momentos, a los alumnos y a los padres, "lo que menos les favorece es que haya un día de huelga".

Según destacó Jokin Bildarratz, en la ronda de contactos planteó la contratación de 1.000 docentes y reiteró que "día a día se están modificando las necesidades", por lo que su departamento propone "y así se ofertó, negociar una serie de criterios para la gestión de estos 1.000 profesionales".

El consejero también detalló que en cuatro días, en la primera semana de inicio de curso, se han realizado 1.190 sustituciones. "Cuando se nos está diciendo desde los sindicatos que quieren que las sustituciones se hagan desde el primer día, les informo que ya el primer día se realizaron 272 sustituciones y esta es nuestra actitud y lo que hemos concretado", aseguró.

En su comparecencia también insistió en que hay una aportación económica de 87,2 millones "que hemos ofrecido, no solo a los representantes de los trabajadores, sino también a toda la comunidad educativa, para analizar de qué manera podemos trabajarla de manera conjunta".

Bildarratz insistió en que la pandemia evoluciona "día a día" y, por ello, reiteró en que esta situación hay que gestionarla "de la mano" y destacó de la ronda mantenida que "todos apostamos por una educación presencial".

"La educación presencial dota al alumno y a la alumna de un instrumento que es muy importante, que es el de la sociabilidad y el de convivir con su igual, para que pueda tener un desarrollo integral, una educación integral y no esté aislado como han podido estar durante unos meses en sus casas", señaló.

Además, el Departamento de Educación del Gobierno Vasco y la Asociación de Municipios Vascos-Eudel acordaron ayer que la puesta a disposición de espacios municipales a los centros educativos con casos COVID-19 será gestionada por parte del departamento y los ayuntamientos, "analizando las necesidades que los centros puedan requerir como consecuencia de la COVID-19, en un momento determinado para el desarrollo de su actividad educativa".

Simultáneamente, los sindicatos anunciaban que extendían la huelga del próximo martes a las 10.000 trabajadoras de las subcontratas del sector, es decir, de limpieza, transporte escolar y comedores. Trabajadoras de estos tres sectores se concentraron ayer en la plaza del Arriaga de Bilbao con una pancarta en la que se leía, en euskera, "garantizar también la seguridad en la subcontratación".

Noemi Etxeberria, de ELA, explicó que sus demandas pasan, por un lado, por tener las mismas garantías sanitarias en la vuelta a clase que los docentes y el resto de personal educativo: "Trabajamos en los mismos centros, que son responsabilidad de Educación", subrayó. Por otra, destacó la inestabilidad laboral en los tres sectores. Hay varios colegios donde no se han retomado los comedores de manera que muchas trabajadoras "no tienen fecha para volver a trabajar ". Por último, consideró que con las medidas de prevención que se aplican, como más limpieza, serían necesarias 2.500 trabajadoras más para trabajar "en condiciones normales".

Por su parte, la asociación que forma la red de colegios cristianos en Euskadi, Kristau Eskola, defendió "el diálogo y no la confrontación". Asimismo, reclamó a los sindicatos que sigan "dialogando con el Departamento de Educación para poder llevar a buen puerto el objetivo de la calidad educativa y de seguridad".

Su director general, Mikel Ormazabal, sostiene que "la presencialidad en la escuela es necesaria". "Tenemos que trabajar la dimensión personal, garantizar la educación integral", indicó, "los niños necesitan verse, hablar entre ellos, reír, jugar, interrelacionarse, aunque sea, provisionalmente, de manera distinta, con unas nuevas pautas de comportamiento".

La huelga. El consejero de Educación aseguró que una jornada de huelga no aporta nada a nadie del sistema educativo.

Contrataciones. El Departamento de Educación recordó que se va a realizar la contratación de un millar de docentes para este curso.

Más espacios. El Departamento de Educación y Eudel acordaron ayer que la puesta a disposición de espacios municipales a los centros educativos con casos de COVID-19 será gestionada por el Departamento y los ayuntamientos.

Los sindicatos. Aumentan la convocatoria de la huelga del martes a los más de 10.000 trabajadores de subcontratas, como transporte escolar, comedores y limpieza.

87,2

Son los millones de euros que Jokin Bildarratz dice haber puesto al servicio de sindicatos y agentes educativos en una aportación para lidiar con las necesidades surgidas por la actual coyuntura.

Kristau Eskola defiende "el diálogo y no la confrontación" y reclama a los sindicatos que sigan en contacto con el departamento de Educación