- Gipuzkoa superó ayer los 7.000 contagios desde que comenzó la pandemia de COVID-19 y registra ya 800 casos más que Araba, un territorio al que acaba de superar en casos totales hace apenas una semana. Sin embargo, las cifras oficiales arrojaron ayer cierto margen para la esperanza. Quizá un espejismo, sí, pero los 146 casos de ayer en Gipuzkoa son la cifra más baja de contagios en los últimos siete días.

Las colas en los centros de salud vascos para hacerse las pruebas PCR son frecuentes ya. El lunes se realizaron otras 6.836 pruebas, lejos de los 10.000 que se han llegado a rozar en varias jornadas, pero aún así el porcentaje de positivos arroja también cierto margen para la esperanza. Solo el 5,8% de los que se sometieron al test dieron positivo. Es el porcentaje más bajo de los últimos días, sensiblemente inferior al 8-9% de jornadas anteriores.

Y el resultado se notó en todo Euskadi, con menos nuevos contagios detectados: 397 en las últimas 24 horas. Cifras alejadas de los 600, 700 y hasta 800 a los que nos habíamos acostumbrado.

Con todo, el número de personas ingresadas en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) son la peor de las noticias. Sigue el goteo. Una persona más ayer y ya son 50 las que necesitan de cuidados intensivos para sobrevivir al COVID. El número de personas que ingresaron en planta en la última jornada fue de 32, pero hubo más altas, con lo cual la cifra de ingresos totales se situó en 291, incluidos los de la UCI.

El Gobierno Vasco anunció hace dos semanas, en pleno pico de contagios detectados, que las cifras podrían empezar a estabilizarse. Lo hacen primero en el número de contagios, mientras que el alivio en los hospitales suele llegar más tarde. Es la consecuencia.

Los contagios sí. Comenzaron a estabilizarse la semana pasada y esta, incluso, podrían remitir. Si se mantienen hoy los datos conocidos ayer, habrá motivos para la esperanza y esa remisión de contagios podría estar dándose ya. El caso es que la mayoría de pruebas PCR se realizan entre el martes y el viernes de cada semana y esos resultados están por llegar aún.

Los datos, en todo caso, no son buenos. 146 nuevos positivos en Gipuzkoa, un territorio que se mantiene en cifras inquietantes si echamos la vista una semana atrás. Siguen siendo 1.255 los casos detectados en los últimos siete días en todo territorio, demasiados, y preocupa especialmente la situación en algunos municipios como Donostia, Irun y Hernani.

En la capital parece haberse llegado a una tensa calma. Lejos quedan ya los más de 100 casos registrados en solo 24 horas y la capital marcó ayer 58 nuevos contagios. Parecen muchos, pero en proporción preocupan mucho más los 11 registrados en las últimas horas en Hernani, una localidad de 20.000 habitantes, lo que equivaldría, en términos de proporcionalidad, a que Donostia hubiera registrado en un solo día 99. También inquieta Irun, con 14 casos en las últimas horas y 97 en siete días.

Si echamos la mirada atrás una semana, eso sí, las cifras peores las mantiene Donostia, con 492: una media de 70 diarios. Aunque los nuevos casos detectados parecen en cierta remisión en la capital. En Hernani acumulan 74 casos en esos mismos siete días.

Son muy pocos. Cada vez menos, los municipios libres de COVID-19 en Gipuzkoa. En solo dos semanas se han caído de la lista cinco y son ya solo siete, según las cifras oficiales, las que se mantienen sin ningún contagio.

Y todo ello, en plena vuelta al cole y con el otoño a la vuelta de la esquina. Su efecto todavía no se ha hecho notar, aunque el porcentaje de contagios detectados entre menores de diez años es cada vez mayor y ayer rozó el 5,8%. Es decir, casi 6 de cada diez contagiados.

Las autoridades sanitarias prevén que en otoño, con los colegios en marcha de modo presencial en todas sus etapas, el número de contagios aumentará nuevamente y por eso se ha hecho especial hincapié en reducir estas cifras ahora. A ello iba encaminada la orden del 19 de agosto de la anterior consejera de Salud, Nekane Murga, y las limitaciones al ocio nocturno en especial tras la rápida propagación del virus durante julio y agosto.