- Los datos sobre la evolución de la pandemia de coronavirus en Euskadi que ayer proporcionó el Departamento de Salud son mejores que los notificados el viernes, ya que reportan 131 contagios menos en las últimas horas. Las cifras, no obstante, siguen siendo muy altas y no permiten ni bajar la guardia ante el riesgo de infección, ni abandonar la preocupación por la tendencia de aumento de casos y sus consecuencias. De hecho, ayer, junto a los 593 nuevos casos -un 18% menos que el máximo histórico de 724 del jueves- se notificaron también las dos primeras muertes de usuarios de residencias de mayores en esta segunda ola de la pandemia, ambas en Bizkaia.

El Departamento de Salud actualizó ayer, a través de una nota, los datos relativos a la evolución de la pandemia, aunque no ofreció cifras desglosadas por municipios. Según los datos facilitados, el viernes se llevaron a cabo 6.579 pruebas, 2.542 menos que la jornada anterior, y en ellas 593 personas dieron positivo, un porcentaje del 9% sobre el total de test realizados.

Por territorios, Bizkaia sigue siendo el que registra un mayor número de casos positivos diarios, con 348 en las últimas horas, 83 menos que el dato anterior, mientras que en Araba, donde se contabilizaron 126 contagiados, se dio un pequeño repunte de dos casos más; en Gipuzkoa hubo 113 casos, 25 menos que los detectados el jueves. Otras seis PCR positivas corresponden a personas con residencia fuera de Euskadi -25 menos que las reseñadas el viernes-.

En cuanto a la incidencia de la pandemia en el sistema hospitalario, el viernes otras 33 personas con COVID-19 ingresaron en los hospitales vascos y hay 23 enfermos que permanecen en las UCI.

Aunque los datos parecen indicar que la gravedad de los nuevos contagios y la necesidad de ingresos hospitalarios están siendo menores que durante la primera fase de la pandemia, ayer se informó de que dos usuarios de residencias de Bizkaia han fallecido en las últimas horas con COVID-19. Se trata de las primeras muertes de residentes en esta segunda ola de expansión del virus. Una de las personas fallecidas se encontraba ingresada en el hospital y la otra había sido derivada a la unidad especializada de la residencia Birjinetxe. Ambas presentaban graves patologías previas.