La Diputación de Gipuzkoa ha comenzado a renovar completamente el firme de la N-I a su paso por Villabona, un trabajo que ha obligado a cerrar el paso durante las 24 horas del día a camiones entre Andoain y Beasain. Ayer fue la primera jornada en la que los camiones no podían circular por esta vía, situación que durará hasta el día 23, cuando se prevé terminar las obras. El sector del transporte en Gipuzkoa ha criticado la medida, ya que obliga a los camiones a “desviarse” y a realizar trayectos “del doble de kilómetros”.