Con una mezcla de resignación y mirada al futuro, la ciudadanía guipuzcoana afronta la crisis que está provocando el coronavirus con una necesidad de aprender de lo sucedido para afrontar mejor experiencias futuras. Es una de las conclusiones que se desprende del estudio de opinión sobre la pandemia que la Diputación ha presentado este miércoles y que valora la gestión de las instituciones y recoge la percepción del impacto negativo que tendrá la enfermedad en la economía.

“Queríamos saber cómo había vivido la ciudadanía de Gipuzkoa tanto la pandemia como sus consecuencias en todos los ámbitos de la vida”, ha explicado la portavoz foral, Eider Mendoza, sobre un trabajo que se enmarca en las investigaciones que la Diputación ha puesto en marcha en las últimas legislaturas para “conocer la opinión de la ciudadanía en muchos aspectos para que ayude a gobernar”. Por de pronto, la mayoría de los encuestados asume que "esto es lo que hay y no hay que darle más vueltas" (38,%) cuando se le pregunta cómo se siente ante la crisis del COVID-19, una respuesta seguida por pensamientos en el futuro (33,1%), confusión (26,2%), tristeza (23,1%) y enfado (21,2%).

Preocupación máxima” en relación de la economía, “que debe ser una de las prioridades de este momento”, ha explicado Mendoza. Un 53,9% considera que la principal prioridad del nuevo escenario será la competitividad económica del territorio, seguido del fortalecimiento de la sanidad (35%), las políticas sociales (17,6%), la crisis laboral (10,7%), el impulso de la educación (7,7), la innovación e investigación científica (6,8%) y el reto demográfico del envejecimiento (6%).

Cuatro de cada cinco encuestados (41,5%) reconoce que la crisis está teniendo un impacto directo en su bienestar emocional, una afirmación seguida por el impacto en el empleo o negocio (29,7%), las dificultades que está provocando para atender a personas que dependen de uno o una (28,7%), la economía del hogar (24,5%) y en la salud de cada uno (19,1%).

En cuanto a las medidas adoptadas, casi el 93% de la ciudadanía aplaude que se decretara el estado de alarma, el 90,5% apoya que se decidiera el confinamiento “hasta el nivel alcanzado” y las medidas en materia laboral, como los ERTE (88,4%). La medida con menos apoyo (27%) es que “se retiren ya todas las medidas de confinamiento”.

Los agentes mejor valorados en esta crisis son los científicos (con un 8,2 sobre 10), los bomberos (8,1), Osakidetza (7,8) y los pequeños comercios (7,6), mientras que los peores el Gobierno español (5,1), los partidos políticos de la oposición en Gipuzkoa y en la CAV (con el mismo 4,6), y los partidos de la oposición en el Estado (2,5). Con esa misma tendencia, también se consideran más transparentes las instituciones más próximas: ayuntamientos (5,9), la Diputación (5,5), el Gobierno Vasco (5,4) y el Ejecutivo central (5).

Las redes sociales no son referentes

El análisis también evidencia cómo se están informando los guipuzcoanos durante esta crisis, aspecto que deja dos notas reseñables. Para un 74,2% la televisión es el medio de referencia al que acudir para seguir la actualidad de la pandemia, seguido de la prensa digital (46,2%), la radio (35,2%) y la prensa en papel (29,1%). Sin embargo, lejos de estas fuentes se sitúan las oficiales: Osakidetza (13,3%), Departamento de Salud del Gobierno Vasco (12,1%), el Ministerio de Sanidad (11,3%) y las distintas webs del Ejecutivo de Vitoria (11,1%). Por detrás de todos se encuentran las redes sociales: Facebook (4,6%), Twitter (4,5%) y los grupos de WhatsApp (3,1%).

Intención de voto

La encuesta, realizada por el Grupo de Análisis e Investigación a 850 personas residentes en Gipuzkoa, también trae un pequeño sondeo de intención de voto sin traslación a escaños, en el que un año después de las elecciones en las forales el PNV volvería a ganar unos comicios para las Juntas Generales. Lo haría con el 34,2% de los votos, casi tres puntos más que EH Bildu (31,4%), aunque con un descenso de casi dos puntos con respecto al 35,9% cosechado en las urnas. La coalición soberanista no aprovecharía esa caída, ya que también se dejaría un 0,5%. Quien sí mejoraría sus resultados, al menos en cuanto a votos, sería el PSE, que crecería del 17,3% al 18,5%, mientras que Elkarrekin Gipuzkoa perdería apoyos (del 9% al 8,8%) y el PP, último partido con representación juntera, subiría (4,7% a 5,5%).