- El presidente del PP, Pablo Casado, y el de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, focalizaron ayer en el líder socialista y presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, sus críticas durante el primer acto de una precampaña que culminará el 13 de febrero con las elecciones en esa comunidad. Fue en Salamanca, durante la Convención Intermunicipal del PP de Castilla y León, en la que Casado intervino de forma telemática un día antes de que Sánchez respalde hoy en Palencia al líder candidato en esta comunidad autónoma, Luis Tudanca.

El presidente de los populares, en cuarentena después de dar positivo en covid-19, exigió al secretario general del PSOE la destitución del ministro de Consumo, Alberto Garzón (Unidas Podemos), por las declaraciones vertidas en el rotativo británico The Guardian contra la ganadería extensiva española.

Pidió por ello “una rectificación y una disculpa” y recordó a Sánchez, quien en su día dijo que “no quería depender de los radicales porque le quitaría el sueño”, que asuma que ese pacto con “partidos radicales” es lo que le impide destituir al ministro. Rompió una lanza por el sector ganadero al recordar “a los urbanitas que piensan que las salchichas se imprimen en 3D” que supone 15.000 millones de euros en producción, 9.000 millones en exportaciones y que da trabajo indirectamente a dos millones de personas.

Son “exportaciones que se ponen en juego” cuando en la prensa internacional se afirma que “se exporta carne de mala calidad”, insistió Casado en sus críticas hacia el ministro de Consumo. La carne española “es la mejor del mundo”, zanjó.

Respecto a la reforma laboral, Pablo Casado respondió a Sánchez, que el pasado viernes pidió formalmente el aval de todos los partidos a esta norma, que no contará con el voto del PP. Se preguntó si acaso el PP tiene que apoyar al Gobierno por el hecho de que derogue “solo un 10% de su reforma” o porque haya habido un pacto con sindicatos o patronal. El presidente del PP dejó claro que Moncloa no les ha llamado y no ha buscado su apoyo y que, por tanto, no contará con el aval de los populares a una reforma que sale “en el peor momento, cuando hace falta más flexibilidad”.

Por su parte, Alfonso Fernández Mañueco llamó a “concentrar el voto en el PP o Castilla y León será pasto del sanchismo”. Llamó por ello a lograr una “mayoría suficiente” para gobernar y completar así “el trabajo realizado durante estos dos años”. Calificó además de “irresponsable” la postura de Garzón sobre la ganadería.