- Muriel Larrea, políglota, poco amante de los focos y convencida de que la política es para mejorar la vida de la gente, tomó ayer las riendas del PP de Gipuzkoa con el objetivo de cohesionar y reflotar este proyecto político en una plaza emblemática para su partido. Su elección pone fin a la situación de interinidad que vivía el PP de Gipuzkoa, presidido de manera interina por José Luis Arrúe desde que quedó descabezado con la marcha de Borja Sémper.
Nacida en Irun el 9 de junio de 1982, casada y madre de cuatro hijos, Larrea asume la responsabilidad de sustituir a este líder carismático y de tomar el testigo de grandes referentes en su partido como Gregorio Ordóñez o María San Gil. De carácter conciliador y cercano, ha impregnado ese afán integrador en el nuevo comité de dirección, que incluye en sus primeros puestos a los concejales Mikel Lezama y Jorge Mota.
Larrea inició su carrera política en Irun, donde ocupó entre 2011 y 2020 el cargo de concejal popular, los últimos cinco años como portavoz. Entre 2009 y 2012 fue secretaria general de Nuevas Generaciones de Gipuzkoa y entre 2011 y 2017 vicesecretaria sectorial de NNGG nacional. En la actualidad es vicesecretaria de Política Medioambiental del PP vasco, además de parlamentaria de PP+C’s.
Técnica superior en Administración de Sistemas Informáticos, estudió Filología Germánica en Francia, habla a la perfección francés, alemán e inglés y vive la política de manera vocacional desde que su padre le llevó a la apertura de una campaña electoral cuando todavía era una niña. Entre sus aficiones favoritas, figuran el baile y la música, pero también el bricolaje, la jardinería y los largos paseos por el monte con su perro y, sobre todo, jugar y disfrutar de sus cuatro hijos.
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