- La familia de Mikel Zabalza considera que los audios difundidos este lunes, en los que un capitán de la Guardia Civil explica que el joven de Orbaizeta fue torturado hasta la muerte, suponen "una oportunidad de oro" para que la Fiscalía General del Estado cumpla "con su obligación, que es investigar qué ocurrió aquella noche en el cuartel de Intxaurrondo".

"El audio habla por sí solo y ya no pueden mirar a otro lado", subrayó este jueves Idoia Zabalza, una de las hermanas de Mikel, en el transcurso de una rueda de prensa convocada en Katakrak por Egiari Zor, fundación que estuvo representada en este acto por Tasio Arrizabalaga, y a la que también asistieron Jon Patxi Arratibel y Ainara Gorostiaga, de la Red de Personas Torturadas.

El caso Zabalza ha cobrado de nuevo actualidad después de que este lunes se escucharan unos audios en los que el capitán de la Guardia Civil Pedro Gómez Nieto expresa con claridad que Mikel murió en el cuartel de Intxaurrondo tras ser torturado.

"Se les ha ido la mano, se les ha quedado en el interrogatorio", responde Nieto a Alberto Perote, por entonces coronel del Centro Superior de Información de la Defensa (Cesid).

La conversación tuvo lugar unos días después de que Zabalza fuera detenido, el 26 de noviembre de 1985 por la Guardia Civil, y desmonta la versión oficial, que todavía hoy mantiene que el arrestado escapó esposado de la Policía cuando iba a descubrir un zulo en Endarlatsa y falleció ahogado en el río Bidasoa. "Mi impresión es que en el interrogatorio posiblemente fue una parada cardíaca como consecuencia de la bolsa de plástico en la cabeza", continúa Gómez Nieto en sus explicaciones.

Esta conversación motivó que la causa se reabriera en 1995, pero el juez no admitió su incorporación al procedimiento judicial porque sus protagonistas negaron que estas voces fueran suyas.

Ahora, con el impacto que ha causado en buena parte de la sociedad la escucha de este audio sacado a la luz el diario digital Público, la familia de Zabalza defiende que hay razones para reabrir la causa, que quedó archivada con un relato de los hechos muy alejado de la creencia generalizada.

"Estos días hemos oído de boca de la fiscal general del Estado que si esta información tuviera alguna relevancia penal, los compañeros fiscales la tendrían en cuenta", recordó Idoia, quien considera que la Fiscalía "tiene, por tanto, una oportunidad de oro de cumplir con su obligación, que es investigar qué ocurrió aquella noche en el cuartel de Intxaurrondo". Además, estima que "tiene también la responsabilidad de contestar cuáles son las razones de no dar por válida una conversación en la que, además, se relatan también las circunstancias de otras dos muertes más -en referencia a las de Lasa y Zabala- por las que ha habido condena".