dOnostia - Gipuzkoa ha sido el único territorio de la CAV donde la tasa de paro se ha reducido hasta marzo del presente año con respecto al trimestre anterior. En concreto, los desempleados se redujeron en 1.300 personas y la tasa de paro se situó en un 7,93% frente al 10,76% de media vasca.
Los datos ofrecidos ayer por el Instituto Nacional de Estadística INE cifró en 26.600 guipuzcoanos el colectivo de demandantes de empleo en el primer trimestre del año, frente a los 27.900 que se registraron en el último trimestre de 2017. En ese periodo, la tasa de paro ascendía a un 8,43%, que en esta ocasión se ha reducido en medio punto.
Las diferencias si se compara el primer trimestre de 2018 con el primero de 2017 son aún más pronunciadas. Entre enero y marzo del año pasado, la tasa de paro se situaba en el 10,72%, casi la misma que en la actualidad presenta el conjunto de la CAV. Han sido, pues, casi tres puntos porcentuales los que Gipuzkoa ha conseguido reducir su población parada en un año.
La situación en el caso del conjunto de la Comunidad Autónoma Vasca es muy diferente, puesto que según la EPA del primer trimestre de 2018 se ha producido una reducción de 2.600 en el número de ocupados, que asciende a 913.600, y un incremento de 1.900 personas en las listas de desempleados que suman 110.200.
Más significativos son los números en el mercado laboral estatal, donde la negativa evolución se ha traducido en la reducción del número de ocupados en 124.100 personas, según los datos de la Encuesta de Población Activa. El sector hostelero, caracterizado por su elevada precariedad laboral, está detrás de este mal comportamiento pues ha destruido 96.000 empleos, según la patronal de las agencias de empleo. El resultado final es que el número de parados en España ha aumentado en 20.400 personas.
En el conjunto de España, la evolución en el primer trimestre del presente 2018 ha dejado una tasa de paro del 16,74% y la ocupación retrocede hasta las 22.670.300 personas, dejando la tasa de actividad en el 58,46%, un nivel que no se registraba desde hace 12 años.
Los malos datos del trimestre en una economía que está creciendo a tasas cercanas al 3% han sorprendió, al menos a la patronal Asempleo, que no dudó en señalar que “ningún escenario planteaba este mal comportamiento de la ocupación y menos si atendemos a que el sector servicios y, dentro de él, la hostelería, expliquen gran parte del descenso”.
La organización que representa a las empresas de trabajo temporal reconoce que la “Semana Santa no ha tenido el efecto esperado y el sector industrial no evoluciona en línea con lo que se presuponía”.
Los asalariados temporales se reducen en unas 128.900 personas con motivo del “discreto” efecto de la celebración de la Semana Santa, que no ha podido mantener los niveles de ocupación a los que se llegó de la mano de la campaña navideña en la EPA del cuarto trimestre de 2017, reduciendo la tasa de temporalidad hasta el 26,1%.
población activa Aunque el número de ocupados se redujo en los citados 124.100, de la EPA se deduce que la mayor parte, 94.700 personas, decidieron no buscar trabajo y salieron de la población activa, cuya tasa se encuentra en niveles no registrados en los últimos doce años al alcanzar el 58,46%.
El número de desempleados en España aumentó en 29.400 personas, hasta los 3.796.100, de forma que la tasa de paro se elevó 20 centésimas, hasta situarse en el 16,74% de la población activa, según los datos publicados en la encuesta del INE.
La evolución demográfica de España y la situación económica tras la crisis de hace una década ha hecho que el mercado laboral cuente con una población activa que se ha ido reduciendo trimestre a trimestre en los últimos cinco años hasta situarse en 22.670.300 personas, de las que 18.874.200 están ocupadas.