Lurraldebus utiliza autobuses de más de diez años para sus nuevas líneas

Lo cierto es que las líneas de transporte público dependientes de la Diputación han experimentado un notable crecimiento en la recta final de la legislatura. De este modo, cinco comarcas de Gipuzkoa han visto cómo se ha ido ampliando el servicio de un modo paulatino. Pero las prisas también tienen sus contrapartidas. “Es verdad que hemos tenido más de una avería. Es algo que está ocurriendo cada vez más, por la cantidad de lineas que se ofrecen y la falta de autobuses de Lurraldebus para cubrir tantos servicios”, admiten chóferes consultados.

La Diputación ha acometido desde comienzos de año este ambicioso proceso, procediendo a la licitación de concesiones que, a tenor del periodo de adaptación que están necesitando las empresas, se antojan un tanto apresuradas.

“Los autobuses nuevos tardan en fabricarse del orden de cuatro a cinco meses. En sentido, después del tiempo que ha pasado desde la concesión, esperamos que para dentro de unos diez días estén ya todos listos”, explica José Luis Iraeta, jefe de Servicio de la empresa La Guipuzcoana, concesionaria del transporte público en Urola Erdia. El profesional añade, no obstante, que utilizar viejos vehículos es una práctica habitual que tiene acomodo legal, de la que echan mano muchas empresas.

En ese sentido, asegura que se han visto obligados a recurrir a vehículos de segunda mano porque la ampliación de frecuencias así lo precisaba. “El contrato se produjo a principios de marzo, y a la espera de los nuevos autobuses, la concesión de la línea regular permite utilizar vehículos que tengan un máximo de 12 años, como los que estamos usando”.

Asegura que no es tan sencillo dar con este tipo de vehículos. “Son difíciles de encontrar, entre otros motivos, porque tienen que disponer de plataforma para discapacitados y otras serie de requisitos”, detalla en relación a los vehículos traídos de Bizkaia.

no es algo puntual Actualmente hay en funcionamiento en estas líneas cuatro vehículos con más de una década de servicio en carretera. Pero no es una situación ni mucho menos puntual. Muchas de las empresas subcontratadas que prestan servicio en carretera se están viendo obligadas a tirar de vehículos al límite del máximo legal de antigüedad.

Según explican fuentes de ELA, la concesión de líneas en carretera no deja de generar controversia. Recientemente, una representación del Comité Permanente de EuskoTren se ha reunido con un representante de la Diputación de Gipuzkoa para exponer los problemas generados en esta materia.

“La respuesta que nos dio a la pregunta de porqué permitía la subcontratación de líneas, cuando entendemos que están en contra de ello, fue que subcontrataban porque las leyes se lo permitían”, censuran.

Desde la central aseguran, además, que algunos de los tiempos de marcha que ha asignado la Diputación a algunas lineas “son imposibles” de realizar. “Han marcado unos tiempos que los conductores no pueden cumplir debido a todas las paradas nuevas que se han ido habilitando. Al llegar a la Universidad, por ejemplo, al entrar en Zarautz... muchas veces no pueden cumplir con el horario previsto, y salen más tarde. Sabemos que se están revisando los tiempos de marcha, pero la gente se sigue quejando de que no llegan a la hora”, explican. Los trabajadores se quejan de turnos ajustados y de prisas constantes, con el consiguiente enfado de los usuarios.

La controversia por la concesión de lineas en carretera tiene lugar dos días después del espectacular incendio de un autobús que cubría la línea Donostia-Arrasate, que obligó a cortar la autopista AP-8 en Deba, y exigió el traslado de una treintena de pasajeros al área de servicio de Itziar.

El incidente ocurrió el martes pasado en torno a las 15.45 horas en sentido Bilbao cuando el vehículo que cubría una de las líneas de Lurraldebus tuvo una avería y acabó siendo pasto de las llamas.