A los cinco meses de la puesta en marcha de la campaña 'Comprometerse a dejar de fumar', la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha ayudado a abandonar el hábito tabáquico a más de 1.000 millones de fumadores de todo el mundo.

Actualmente, la campaña está trabajando directamente con 29 países, cada uno de los cuales acordó con la OMS algunas actividades, entre las que se incluyen la realización de campañas nacionales de concienciación, el lanzamiento de nuevas herramientas digitales, la revisión de políticas, la participación de los jóvenes, la capacitación de trabajadores de la salud, la apertura de nuevas clínicas para dejar de fumar, el apoyo a las terapias de reemplazo de nicotina o el establecimiento de un número gratuito nacional para dejar de fumar.

"Los fumadores tienen hasta un 50 por ciento más de riesgo de desarrollar una enfermedad grave y muerte por COVID-19, por lo que dejar de fumar es lo mejor que pueden hacer los fumadores para reducir el riesgo de este coronavirus, así como el riesgo de desarrollar cánceres, enfermedades cardíacas y enfermedades respiratorias. Instamos a todos los países a que se unan a la campaña de la OMS y creen entornos libres de tabaco que brinden a las personas la información, el apoyo y las herramientas que necesitan para dejar de fumar", ha dicho el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.

A nivel mundial, aproximadamente el 39 por ciento de los hombres y el 9 por ciento de las mujeres consumen tabaco. Las tasas de tabaquismo más altas se encuentran actualmente en Europa con un 26 por ciento, y las proyecciones solo muestran una disminución del 2 por ciento para 2025 si no se toman medidas gubernamentales urgentes.