Isabel II es una de los mandatarias más importantes del mundo. A pesar de su avanzada edad, sigue controlando mucho de los asuntos que afectan a su país. Es por ello que no es fácil acceder a ella y son sus secretarios personales lo que cogen las llamadas y se encargan de filtrarlas, ya sean oficiales o personales.

Sin embargo, hay dos personas que se saltan ese filtro y pueden hablar directamente con la monarca de 95 años.

Y esas personas son su hija, la princesa Ana, y su director de carreras, John Warren, según informa el diario ‘The Sun’ citando el podcast de Royally US Christina Garibaldi.

La princesa Ana siempre ha tenido una relación muy especial con su madre y ahora se confirmado que esa relación se confirma con este detalle. Además, John Warren es uno de los jinetes más importantes del mundo y supervisa todas las carreras y los intereses de cría de la reina.

Evidentemente, hay máxima seguridad en torno a el teléfono personal de Isabel II, un Samsung, que está encriptado contra piratas informáticos cifrado por M16, según el diario ‘The Mirror’.