- Kote Cabezudo deslizó ayer que la causa abierta en su contra se produce en un contexto en el que “desde hace diez años la sociedad no quiere saber nada de desnudos”. A preguntas de la defensa, declaró que “el desnudo no está bien visto. Siempre he hecho arte y belleza, pero hoy en día es más fácil ver una película de violencia”, dijo.

El fotógrafo reconoció que algunas de las modelos representadas por la acusación le pidieron dejar de aparecer en sus páginas web, “algo que legalmente tenían el derecho de hacer, pero previo pago de una indemnización por lo que ello ocasionara”. En este sentido, afirmó que negoció “de muy buena fe” con el letrado de una de ellas.

Manifestó no recordar si siguió mostrando en sus páginas web o perfiles de Facebook fotos de esas chicas que le pidieron eliminar imágenes de ellas, algo que, en todo caso, precisó “no es tan fácil”, ya que “expertos en informática no lo pueden hacer” y escribió “un montón de veces para denunciarlo”.

Durante la vista, la acusación particular solicitó que las presuntas víctimas del fotógrafo donostiarra declaren en los próximos días “sin mascarilla”, teniendo en cuenta la relevancia de su testimonio y de la importancia que puede cobrar durante el juicio la comunicación no verbal.

El tribunal hizo un receso para valorar esta y otras cuestiones planteadas por las partes. La acusación particular solicitó además al tribunal que no admita una prueba documental sobre un supuesto contrato de una de las perjudicadas con el acusado.

De los documentos que aporta, señaló el letrado Mario Díez, “se evidencia un índice de falsedad”. Aseguró que la firma del contrato que supuestamente vincula al fotógrafo donostiarra con una de las presuntas víctimas “se ha realizado con un bolígrafo diferente al que utilizó la perjudicada”, en el que además se habría modificado su edad. En ese sentido, anunció el inicio de acciones legales por aportación de documentación falsa.

Después de retirarse a deliberar, el tribunal admitió los contratos, aunque advirtió de que si podría adoptarse medidas si durante el juicio las víctimas no los reconocen. Se da la circunstancia de que Cabezudo ya ha sido condenado en otra causa por aportar contratos falsos al caso.