Gipuzkoa es mundialmente conocida por su cultura, gastronomía y belleza única, lo que provoca que cada año cientos de miles de personas visiten el territorio.
Una de las visitas más recientes fue la del creador de contenido Miguel Martín, que visitó numerosos municipios guipuzcoanos.
Dos semanas después de compartir su experiencia en Zarautz, el también reportero de La Ser y monologuista ha querido publicar cómo fue su paso por Deba y Tolosa.
En referencia al municipio costero, el influencer quiso poner en valor su playa y sus paisajes: "He estado en ese increíble pueblo costero de Gipuzkoa y me ha flipado la playa, la ruta de miradores, la plaza del pueblo, el claustro De la Iglesia de Santa María... Me voy a empadronar en Gipuzkoa".
"Qué maravilla Tolosa"
El monologuista también visitó Tolosa, y destacó su mercado y su gastronomía: "Mercado de Navidad de Tolosa en 60 segundos. He estado esta mañana en esta maravillosa ciudad de Gipuzkoa y menudo ambiente había. Comida rica, la gente a tope, charangas, poteo… Qué maravilla Tolosa y los Tolosarras".
Asimismo, Martín quiso poner en valor la calidad de los alimentos del mercado, y bromeó señalando que es "obligatorio" vender productos de proximidad. "La gente baja con sus productos del caserío", añadió.
Anterior visita a Zarautz
El locutor compartió hace unas semanas cómo fue su visita a Zarautz.
"He estado conociendo este precioso pueblo costero de Gipuzkoa. Me ha flipado. Qué olas, qué comida, qué ambiente… No había tanto surfero como en verano y no era al único al que le sobraba algún kilo", escribió junto al vídeo.
Lo primero que hizo fue definir la playa como "preciosa", y también quiso destacar lugares emblemáticos como el Palacio de Narros, el centro del municipio el cine Modelo o el frontón.
Asimismo, mostró a sus seguidores el Belén de Narros o el parque navideño de la localidad.
Municipios con identidad propia
Gipuzkoa cuenta con municipios muy distintos entre sí, pero unidos por una fuerte identidad.
Deba y Tolosa son un buen ejemplo de esa diversidad: uno mira al mar Cantábrico y el otro se asienta en el corazón del interior, a orillas del río Oria. Ambos combinan historia, tradición y un presente marcado por la vida local.
Deba es uno de los municipios costeros más singulares de Gipuzkoa. Situado en la desembocadura del río Deba, ha sido históricamente un punto estratégico para el comercio marítimo.
Su casco urbano conserva un aire tranquilo, con calles que recuerdan su pasado portuario. La playa de Deba, amplia y abierta, es uno de sus principales atractivos, muy frecuentada tanto por vecinos como por visitantes en verano.
Más allá del mar, Deba destaca por su riqueza geológica y patrimonial. El Geoparque de la Costa Vasca, compartido con Zumaia y Mutriku, sitúa al municipio en el mapa internacional del turismo científico.
Además, la iglesia de Santa María la Real es una de las joyas del gótico vasco, reflejo de la importancia histórica de la localidad.
Antigua capital del territorio
Tolosa, por su parte, es uno de los municipios más emblemáticos del interior guipuzcoano.
Antigua capital del territorio, mantiene un marcado carácter urbano y comercial. Su casco antiguo, atravesado por el río Oria, conserva edificios históricos, plazas porticadas y una intensa vida social que se percibe especialmente en los mercados y en los bares.
La localidad es conocida también por su tradición cultural y festiva. El Carnaval de Tolosa es uno de los más populares de Euskal Herria, y atrae cada año a miles de personas.
A ello se suma una fuerte identidad gastronómica, con productos como las alubias de Tolosa, que forman parte del prestigio culinario del municipio.
En resumen, Deba y Tolosa representan dos formas distintas de entender Gipuzkoa, pero ambas reflejan el equilibrio entre historia, entorno y vida local que define al territorio.