Pintar una habitación o cualquier espacio del hogar no es una tarea sencilla ni rápida.
Requiere tiempo, esfuerzo y una buena preparación previa, que incluye limpiar, lijar y cubrir los muebles y el suelo para evitar manchas.
Es un proceso que puede resultar agotador y tedioso, especialmente cuando se deben aplicar varias capas o trabajar en zonas difíciles de alcanzar. Además, el olor de la pintura y los tiempos de secado pueden alterar la rutina diaria durante varios días.
En este sentido, los expertos de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) recuerdan que para obtener un buen resultado es fundamental seguir dos etapas principales: preparar la superficie y aplicar la pintura.
Cómo pintar correctamente
Según explican, la pintura se adhiere mejor sobre una pared limpia. Por eso, si la superficie presenta grietas o agujeros, es necesario repararlos con una pasta específica. Los pequeños desconchones pueden alisarse con una lija fina, y posteriormente se recomienda limpiar con agua y jabón y dejar secar bien antes de comenzar. En algunos casos, puede ser útil aplicar una imprimación, sobre todo si lo aconseja el fabricante, para mejorar el acabado final.
Una vez que la pared está lista, llega el momento de pintar. La OCU aconseja remover bien la pintura antes de verterla en la bandeja y proteger molduras, enchufes y suelos con cinta de carrocero, papel o cartón.
Es importante usar ropa cómoda, cubrirse el cabello, proteger los ojos y ponerse guantes. La técnica ideal consiste en pintar de arriba hacia abajo, empezando por el techo antes que las paredes, para cubrir las salpicaduras. Primero se pintan los bordes y rincones con una brocha, y después el resto con el rodillo. Si se es diestro, se recomienda comenzar por la esquina superior derecha e ir avanzando hacia la izquierda y hacia abajo en tramos de unos 60 cm. Las primeras pasadas deben cargarse un poco más de pintura, pero sin presionar el rodillo, haciendo movimientos en horizontal, vertical o en forma de W.
Entre una capa y otra conviene dejar 24 horas de secado. Algunos fabricantes recomiendan aplicar hasta cuatro capas, incluyendo la imprimación, mientras que otros ofrecen pinturas monocapa, que ahorran tiempo y esfuerzo.
No obstante, la OCU advierte que no todas las pinturas que se anuncian como monocapa cumplen realmente con esta característica. Una vez terminada la tarea, es esencial mantener el espacio bien ventilado durante varios días, ya que la pintura puede tardar hasta una semana en liberar por completo los solventes.
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