La Guardia Civil ha detenido en Granada al conductor de un turismo que no se detuvo cuando los agentes le dieron el alto tras cometer una infracción, porque transportaba 100 kilos de hachís fraccionado en pastillas, y además ha arrestado a una compañera del anterior que fingió ser víctima de un robo para despistar a los agentes.

Según ha informado este cuerpo armado, agentes del destacamento de Tráfico han detenido a un hombre de 30 años por un delito de tráfico de drogas tras interceptar su vehículo mientras circulaba por la autovía A-92 en Granada transportando 100 kilos de hachís.

La actuación comenzó cuando los agentes vieron al conductor cometer una infracción y le dieron el alto, señal a la que hizo caso omiso para emprender la huida.

Tras recorrer unos kilómetros, las patrullas, auxiliadas por otros agentes, lograron que el conductor detuviese el vehículo y, ante su visible nerviosismo, procedieron a registrar el vehículo.

Localizaron en el interior del coche cuatro bolsas de deporte cargadas con mil pastillas de hachís con un peso total de 100 kilos.

Durante el registro, una mujer se personó en el lugar haciéndose pasar por víctima de un robo, con el objetivo de entretener a los agentes.

Sin embargo, no logró su objetivo, y tras comprobar que estaba vinculada con el vehículo interceptado y con el detenido, ambos han pasado a disposición judicial como presuntos autores de un delito de tráfico de drogas.