El responsable de un club de alterne de Aduna ha sido detenido por un presunto delito de explotación sexual a una trabajadora a la que, en una ocasión, intentó agredir sexualmente. Asimismo, la mujer ha denunciado un trato degradante e inducción al consumo de sustancias estupefacientes, según ha informado el Departamento de Seguridad.

El pasado sábado por la tarde, la Ertzaintza tuvo conocimiento de un supuesto caso de explotación sexual en un local de alterne ubicado en la localidad de Aduna. Según se pudo conocer a través de la denuncia de una trabajadora, en el local donde se ejerce la prostitución, las condiciones laborales eran de explotación.

En contra de su voluntad

El responsable del local exigía la realización de servicios durante horas seguidas sin descanso y obligándolas a realizar trabajos en contra de su voluntad.

Asimismo, según la víctima, el trato en general hacia las personas trabajadoras era degradante y, en una ocasión, la intentó agredir sexualmente, pudiendo zafarse y escapar de la habitación. Además, según su versión, en el local se estaría facilitando sustancias estupefacientes tanto a los clientes como al personal que trabaja allí.

Seguridad ha señalado que la situación de vulnerabilidad condujo a la víctima a soportar situaciones "difíciles y denigrantes" durante varios meses por miedo a represalias, hasta que el pasado sábado se decidió a denunciar los hechos.

Detención

Los agentes encargados del caso iniciaron las investigaciones tendentes a comprobar los hechos denunciados y, este lunes por la mañana procedieron a la detención del responsable del local, de 66 años, como presunto autor de los delitos de prostitución e intento de agresión sexual.