El Ayuntamiento de Usurbil ha anunciado que está a la espera del resultado de la investigación que la Ertzaintza ha abierto a raíz del grave accidente ocurrido este fin de semana en el polígono Osinalde -donde dos menores resultaron electrocutados al subirse una torre de tensión- para determinar qué medidas debe tomar. Asimismo, ha señalado que según la última conversación mantenida este mismo lunes por la mañana, el menor que resultó gravemente herido "permanece estable".

El herido grave está "estable"

El Consistorio ha emitido un comunicado en el que afirma que permanece "en contacto permanente" con la Policía vasca desde el sábado por la tarde, cuando se produjo el trágico accidente en el que resultaron heridos los dos menores, de 11 y 15 años. Es el más joven el que sufrió heridas graves y fue trasladado a la Unidad de Grandes Quemados del Hospital de Cruces, donde permanece ingresado. Concretamente, según las noticias que han tenido esta misma mañana desde el Ayuntamiento, el menor "permanece estable".

Tanto la alcaldesa de Usurbil, Agurtzane Solabarrieta, como una concejala acudieron al lugar de los hechos cuando tuvieron noticia de lo ocurrido. Para el ayuntamiento, en este momento lo más importante es el estado de salud del menor gravemente herido.

“Vivimos estos momentos con tristeza, como no puede ser de otra manera: queremos expresar nuestro malestar y pesar por ello. Esperamos y deseamos que el menor se recupere, y queremos expresar nuestro apoyo a sus familiares y allegados", han subrayado en el comunicado municipal, en el que explican que la Ertzaintza ha iniciado un atestado para garantizar que esa línea de alta tensión cumple con la normativa vigente de seguridad. En este sentido, el Ayuntamiento " queda a la espera, para determinar qué medidas debe tomar".

"Esclarecer los hechos"

En el comunicado también se detalla que el Gobierno municipal ha tratado de contactar con Iberdrola "sin éxito". No obstante, la compañía eléctrica ha hecho público un comunicado en el que lamenta lo sucedido, pero señala que tanto la torre como el terreno donde se ubica son de propiedad privada y, por lo tanto, corresponde al propietario adoptar la medidas de seguridad oportunas.

Desde el Consistorio recalcan que es "primordial esclarecer los hechos, saber si esta torre cumple con todas las medidas de seguridad necesarias y determinar las medidas para que no vuelva a suceder una desgracia como esta, cada uno asumiendo las responsabilidades que corresponden".