La Fiscalía de Gipuzkoa pide un año y cuatro meses de cárcel para un ertzaina al que acusa de golpear en una pierna, durante una identificación en una calle de Donostia, a un varón que posteriormente tuvo que ser sometido a una reconstrucción quirúrgica de los ligamentos cruzados de la rodilla.
En la vista por estos hechos, que tendrá lugar próximamente en la Audiencia de Gipuzkoa, también será juzgado el hombre agredido, para el que el Ministerio Público pide distintas multas por un importe total de 4.200 euros por un delito de desobediencia grave y un delito leve de lesiones.
Según el escrito de acusación provisional, al que ha tenido acceso EFE, los hechos sucedieron el 10 de julio de 2019 cuando el ertzaina acusado desempeñaba labores de seguridad ciudadana en Donostia, debidamente uniformado, junto a un compañero con el que formaba patrulla.
Sobre las 22.30 horas, los agentes fueron alertados desde la central para que acudieran al barrio de Morlans, donde al parecer un varón había tenido un incidente con su expareja sentimental.
Poco colaborador
Una vez en el lugar, los policías pidieron al sospechoso que les acompañara a un sitio más apartado para poder identificarlo, y aunque el hombre no se avino en un primer momento y se mostró poco colaborador, finalmente accedió a entregarles su DNI.
En este contexto, a pesar de que había sido advertido de que no podía fumar, el varón encendió un cigarro con un mechero que luego mantuvo dentro de su puño "cerrado y alzado en alto en actitud amenazante hacia los agentes", quienes le pidieron que les entregara el encendedor.
El documento de la Fiscalía precisa que, como el hombre no atendió la orden, el policía acusado intentó arrebatarle el mechero, momento en el que el varón presuntamente dio al ertzaina un manotazo en el brazo derecho.
"Sensación de ahogo"
En esta tesitura, el policía agredido presuntamente respondió con "una fuerte patada en la rodilla izquierda que hizo caer al suelo" al varón, tras lo que se situó sobre él y supuestamente le colocó la rodilla en el cuello "causándole sensación de ahogo".
Todo ello "en un evidente exceso en el ejercicio de sus funciones y empleando una fuerza desproporcionada en atención a las circunstancias y la oposición mostrada" por el varón identificado y "con clara intención de menoscabar su integridad física", según describe la Fiscalía.
A consecuencia de este incidente, el ertzaina sufrió erosiones en el antebrazo derecho para cuya sanación no precisó de tratamiento médico alguno.
Por su parte, el varón identificado resultó con una posible distensión del ligamento lateral externo, contusión ósea, leve hundimiento de la cortical en el tercio anterior del cóndilo femoral y tercio medio y posterior de la meseta tibial.
Intervenido quirúrgicamente
Igualmente, sufrió un esguince de ligamento colateral interno y una lesión del ligamento cruzado anterior y tuvo que ser intervenido quirúrgicamente mediante artroscopia en la rodilla izquierda para reconstruirle los ligamentos cruzados.
El perjudicado invirtió 309 días en su recuperación y rehabilitación y como secuelas presenta una lesión ligamentosa y una cicatriz por la operación.
La Fiscalía considera que los hechos cometidos por este hombre son constitutivos de un delito de desobediencia grave y resistencia a la autoridad en concurso con un delito leve de lesiones, mientras que al ertzaina le imputa un delito de lesiones.
Además del año y cuatro meses que el Ministerio Público reclama para el agente por estos hechos, también solicita que sea suspendido de empleo y sueldo durante el tiempo de duración de la condena y que compense al agredido con un total de 18.380 euros más los intereses legales correspondientes.
Por su parte, el hombre identificado tendrá que compensar al ertzaina "en la cantidad económica que resulte acreditada" durante el juicio por los días que invirtió en la cura de su lesión.