Efectivos de los bomberos han realizado mediciones en el aire del polideportivo Majori-Altamira de Ordizia la mañana de este martes, tras la fuga de cloro que se produjo este lunes, y se ha concluido que "no hay trazas de cloro en el ambiente", según el alcalde de la localidad, Adur Ezenarro. Asimismo, técnicas del Departamento de Salud del Gobierno Vasco han analizado el agua de las piscinas y, aunque ambas pruebas han tenido resultados "óptimos", la apertura de las instalaciones acuáticas se postergará hasta el miércoles "como medida de precaución y seguridad". Será entonces, a partir de las 07.00 horas, cuando el centro deportivo se abra al completo.

Las piscinas y los vestuarios adyacentes permanecen cerrados al público durante este martes, mientras que el resto del centro ha reabierto sus puertas a las 9:30 horas, según ha comunicado el Ayuntamiento de la localidad a primera hora. De la misma manera, las personas que dejaron sus efectos personales en el momento de la evacuación han podido acudir a recuperarlos a partir de las 11:00 horas.

La persona que permanecía ingresada en un centro hospitalario ha sido dada de alta a la mañana de este martes. Se trata de un empleado de Mantenimiento, según ha explicado el alcalde en Euskadi Irratia. Por tanto, los siete afectados que tuvieron que ser ingresados en el hospital ya se encuentran fuera de la misma.

"De momento no sabemos las causas", ha señalado el primer edil, aunque ha apuntado a la hipótesis inicial: "Los bomberos también han indicado que han encontrado algo en una tubería". "El ácido y el cloro se utilizan para controlar el pH de la piscina, cada uno por separado, pero una gota es suficiente para que haya una gran reacción química", ha añadido, antes de detallar que hasta el momento "nuestros trabajadores no han podido entrar. Ayer los bomberos nos indicaron que alguna tubería pudo romperse, pero aún no sabemos".

Ezenarro se ha felicitado de que "la evacuación funcionó de manera bastante efectiva y veremos qué mejoras podemos hacer. El entrenador de natación dio aviso de que aquel olor no era normal, avisó al socorrista y vimos que la situación del cloro estaba fuera de control. La piscina y los vestuarios fueron las zonas más afectadas, y el resto de la instalación la pudimos vaciar con mayor tranquilidad. Por fortuna, podemos decir que la evacuación funcionó".