La titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Pamplona decretó ayer el ingreso provisional, comunicada y sin fianza del autor de un puñetazo a un policía municipal en la calle Curia el 7 de julio, al finalizar la procesión. Las otras siete personas arrestadas por la Policía Municipal y la Policía Nacional han quedado en libertad provisional, cuatro de ellas después de comparecer ante el juzgado de guardia imputadas por los delitos de odio, desórdenes públicos y atentado a la autoridad.

Seis hombres y dos mujeres fueron arrestados el domingo y el lunes como resultado de la investigación llevada a cabo sobre los altercados en los que resultaron golpeados varios policías municipales, entre ellos uno que sufrió lesiones en la nariz. Tres de ellas fueron puestas en libertad el mismo lunes.

Durante la jornada de ayer fueron puestos a disposición judicial cinco detenidos, entre ellos E.C.E., vecino de Mutilva, de 40 años, como autor del puñetazo a un policía municipal, que fue agredido después de arremeter contra otro varón que le había mojado con un vaso. A instancias del Ministerio Fiscal, la jueza decretó su ingreso provisional en prisión por los delitos de odio, desórdenes, atentado y lesiones.

El detenido negó ante la jueza haber protagonizado los hechos atribuidos “afirmando que acudió a la procesión con sus padres, sus suegros y otros familiares para echar el vermut, reconociendo únicamente un golpe con intención de repeler un supuesto puñetazo que el agente dirigió a su madre, sin motivo alguno”, indica la jueza, que añade que esta afirmación parece de sustento alguno porque ni se ve en las imágenes esas personas mayores que supuestamente le acompañaban, ni se ve esa supuesta agresión dirigida por el agente, muy al contrario, lo que se ve es su acometimiento directo a dicho agente”.